ʟᴏᴠᴇʟʏ ʟᴏᴠᴇ! [Quackity x Female!Oc]

140| Borracho y Mandilón

Todos estaban bebiendo por el tema de que se habían reunido en Barcelona por el torneo de el Rubius. Pero había un pequeño problema: el alcoholismo de Alexis Quackity. Al de greñas le encantaba la bebida, obviamente no era alguien que mandaba su vida a la basura por esta, pero sí que amaba beber.

"¡Ándele, quédate, wey!" Exclamaba tirando de el saco de su amigo.

"No mames, Quackity, llevamos horas bebiendo, cabrón." se quejaba Cry tomándose la frente, se estaba cayendo del sueño.

"Es cierto."

"¡Pero al after!" Insistía Alexis.

"¡Este es el after del after, pendejo!" Le dijo Juan de regreso, también estaba muy tomado.

"Ah, chinga. Pues, otro." Esto hizo que sus amigos rodaran los ojos. "¡No sean putos! ¡Hay que seguirle!" Gritaba.

"Vato, ya estamos cansados y estás bien tomado, wey." Le dijo Aldo metiéndose a la discusión. "Ya córtale o—"

"¿O qué, mamón?" Desafió Alex.

"O voy a llamar a tu esposa, wey." Amenazó el moreno señalándolo. "Estás avisado."

"Llámala, puto. No le tengo miedo." Sus palabras no eran tan pesadas, pero bien que lo parecía.

"Sobres." Murmuró Aldo al verlo voltear para seguir bebiendo.

[...]

Unos minutos pasaron, mismo dónde Alexis estuvo bebiendo. Su rostro estaba enrojecido por el alcohol y su nivel de energía era increíble, estaba hiperactivo como niño pequeño.

Entre tanta risa y charla sintió un escalofrío en su espalda que lo hizo dejar de reír y de beber. Lentamente volteó a la salida del lugar y vió a su esposa cruzada de brazos con el ceño fruncido, se notaba por su vestimenta cómoda pero tapada y su rostro sin maquillaje que la habían despertado de su sueño con esa llamada, después de todo, era de madrugada. La castaña le miraba fijamente dándole leves toques al suelo con su pie, Alexis quiso mantener su firmeza, o tal vez era el alcohol actuando por él, pero no le hizo caso y siguió bebiendo fingiendo que no la había visto.

"Alex, creo que Mary está en la puerta." Le dijo Roier en su inocencia.

"¿Y? Ya estoy muy grandecito para mandarme solo." Con cada palabra que decía sentía más escalofríos en su espalda, fue horrible cuando se expandió por su cuerpo.

"No lo sé, se ve muy molesta." Ante la insistencia de su amigo volvió a mirar y la encontró más enojada que antes.

"¿Saben qué?" Sonrió Alexis sintiendo como sudaba frío. "Ya estoy cansado, subiré a la habitación." El after estaba siendo en el bar del hotel.

Los chicos se comenzaron a despedir de el pelinegro y este hizo lo mismo. Al caminar a la salida fue caminando rápido, no quería hacer enojar aún más a su esposa. Al llegar a la salida la francesa le agarró de la oreja y tiró de esta caminando fuera del bar, en el proceso estuvo regañándolo y diciéndole muchas cosas que no se debían recalcar.

Mary estaba furiosa, tanto que Alexis no dijo absolutamente nada, ni para defenderse, pocas eran las veces en las que se enojaba de esa forma y era de temer. La situación era peor que las veces anteriores; la despertaron de su sueño para que bajara adormilada al bar a llevarse a su esposo que estaba de mala copa, todo luego de que por fin lograra dormir a sus bebés.

A regañadientes entró a la habitación y luego de otro regaño se fue a duchar para que se le bajara la borrachera, eso era petición de su mujer. Al salir Mary estaba durmiendo profundamente, Alexis se acercó a la cama y nada más acostarse para tratar de abrazarla escuchó su voz.

"No me toques." Fue directo y preciso, Alex ni la tocó, no sabía cómo se dió cuenta de que la iba a abrazar.

Refunfuñando se dió la vuelta y trató de dormir, fue difícil, todo le daba vueltas y ahora se sentía triste por enojar a su esposa que siempre era tan linda. Mary ni gritaba y esa madrugada en el ascensor de regreso a la habitación la escuchó gritarle miles de cosas molesta. Debía planear algo para ganarse sus disculpas.

.
.
.
Si hay faltas de ortografía o un error, por favor déjenme saber.
.
.
.