ʟᴏᴠᴇʟʏ ʟᴏᴠᴇ! [Quackity x Female!Oc]

112|Mother's Day

Mary no era una mala mujer. La francesa se caracterizaba por ser una persona con un corazón enorme y con una luz interior enorme. Ella no gritaba si se enojaba, controlaba sus palabras si se enojaba para no herir los sentimientos de nadie y no era ni capaz de alzarle la voz a sus hijos por peor que se portaran. Cuando Alexis se fijó en ella fue justamente luego de ver lo linda que era por dentro, claro, era una chica preciosa por fuera, pero por dentro también y eso no sucedía tanto. Todo esto y más lo hicieron querer que ella fuera la madre de sus hijos y lo había logrado.

La castaña se encontraba recostada en su cama mirando una película. El aire acondicionado estaba casi al máximo y la luz estaba apagada, lo que alumbraba era la televisión. Era de mañana y su esposo se había ido de la cama hace no más de veinte minutos para hacerle el desayuno, eso decía él. Cuando la puerta volvió a abrirse el pelinegro entró con una bandeja donde tenía el desayuno de la mujer, junto a él y casi haciendo que se cayera entraron los niños correteando.

"¡Mami, mami!" Gritaban juntos mientras se subían a la cama sin importarles que casi tiraban a su padre.

"Mis niños, hola~" sonrió enormemente ella reincorporándose para extender sus brazos recibiéndolos con alegría. Los niños saltaron a la cama y luego a sus brazos.

"¡Felicidades, mami!" Dijo Amely con una gran sonrisa para darle un beso en la mejilla a su madre.

"Gracias, mi amor." Rió mirando a su niña para ver a su esposo. El pelinegro dejó la bandeja en la mesa de noche y Mary pudo ver que era su desayuno preferido, no solo eso, también tenía una carta en esta. "Se ve rico." Dijo acariciando el cabello de sus niños para mirar al hombre.

"Me gradué de chef, ¿qué esperabas?" Bromeaba él para sentarse a su lado y quitarle a alguno de los niños. "A ver, garrapatas. Dejen a su madre comer tranquila." Decía mientras agarraba a Tiana para ponerla sobre una almohada, luego hizo lo mismo con Alexa.

"No quiero." Dijo Thiago acostándose en las piernas de su madre haciéndola reír.

"Toño." Gruñó Alex para agarrarlo y alejarlo también. "Déjala comer, wey."

El pequeño se quedó acostado molesto queriendo estar con su mamá pero no lo dejaban. Amely se quedó sentada junto a su madre sin estar encima de ella. Mary tomó la bandeja para ponerla sobre sus propias piernas y desayunar mientras escuchaba y veía a su esposo jugar con su hijo a las luchitas riendo. Sus bebés estaban mirándolos riendo mientras aplaudían, por alguna razón, a Alexa le daba mucha risa verlos jugar así. A Tiana le daba risa en si cualquier cosa, era una bebé de meses, después de todo. Entre todo el juego Alexis agarró a Alexa y suavemente le hizo una llave haciéndola reír. Aveces agarraba a sus niños y los dejaba caer en la cama, depende cual era el nivel de fuerza que usaba. De todas formas no los hería, no era su intención.

Mientras ellos jugaban Mary leyó la carta que le dió su esposo. Sonrió por los pequeños detalles, en resumen, era una carta donde le decía lo hermosa y genial que era. Le decía que era una gran mujer, la más grandiosa del mundo y la mejor madre del planeta. Le decía tantas cosas lindas que la enternecieron. Al final de la carta había un corazón chueco que la hizo reír. En la parte de atrás del papel habían dibujos y garabatos de sus hijos y unas pequeñas palabras de parte de su hija mayor diciéndole que era la mejor mamá del mundo.

Fue una mañana tranquila. En la noche fueron a cenar y Alexis casi se muere por lo mucho que pagó. Normalmente se dividía la cuenta con su esposa, esta vez quiso invitar todo y todo era desde la comida de los niños hasta la suya y la de su mujer. Se debía añadir que Thiago tenía un apetito enorme, era idéntico a su papá, después de todo. Ese fue el día de las madres en la casa de los Maldonado.

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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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