Tras su divorcio, Jimin cría solo a su bebé, apoyado por su mejor amigo Jungkook, un alfa que siempre lo ha amado.
Mientras comparten más tiempo juntos, Jimin empieza a cuestionar sus sentimientos.
¿Podrán encontrar el amor juntos?
Notas:
•Fantasía
...
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Jungkook lo notó tan pronto Jimin abrió la puerta. Su aroma estaba agrio, probablemente debido a su estado anímico.
—Woah, que feo te ves.—Dice para molestarlo y el ahora rubio le saca el dedo del medio.—Oye, que grosero.
—¡Tio Koooooooooookie !—Grita la niña saliendo de su escondite.—Appa me quiere pegar en el trasero.
—¡Dile las cosas bien, bicho!
Sunhi salta a los brazos de Jungkook quien la atrapa y enfrenta a Jimin.
—¿Por qué te quiere pegar en el trasero?—Pregunta mientras acaricia su pelo.
—Porque es malo.
—No es así. Ha estado comiendo a escondidas chocolate, ha dejado una tableta en la cesta de la ropa sucia, y cuando puse la lavadora ...se ensució todo.
—¿Y por qué no revisaste?—Frunce el ceño Jungkook.
—Lo había dejado listo para meter en la lavadora. Y ese bicho con cara dulce lo arruinó.
—Estaba hablando con un hombre. —Expone la niña. —No me toma atención.
Jungkook lo regresa a ver, Jimin está colorado evitando la mirada.
—Lo que puedo notar es que fue un accidente. Un descuido...Es tu culpa por dejar dulces a la mano y no estar a lo que tienes que estar. —Dice Jungkook en dirección al rubio y la niña asiente.
—No te metas cuando regaño a mi hija. Además, es mi problema. Así, que venga vamos Sunhi, a la ducha para que te vayas con Jungkook.
—No porque me vas a pegar. —Se victimiza hundiendo la cara en el abrigo de Jungkook.—Duchame tú, Tio Koo.
—¿Puedo hacerlo? —Enfatiza mirando a Jimin quien resignado asiente.
—Solo porque eres tú. Ahora te llevo la toalla al baño.
Jungkook va con la pequeña.
—Gracias Tio Koo.—Lo abraza.
—No puedes comer dulces a escondidas, mucho dulce es malo.
