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Jungkook lo sostuvo firmemente, sintiendo cómo el cuerpo de Jimin temblaba en sus brazos, desmoronándose bajo el peso de sus inseguridades y el dolor que lo ahogaba. El alfa tomó una respiración profunda, luchando con las palabras que sabía que debía decir, las palabras que Jimin necesitaba escuchar, aunque fueran duras.

—Jimin Hyung, escucha —comenzó Jungkook, su tono aún severo, pero suavizando un poco la voz mientras le daba espacio para levantar la cabeza y mirarlo—. No me importa lo que haya pasado con Eunwoo, no me importa lo que te hayas dicho a ti mismo para convencerte de que eres "menos". Pero quiero que escuches algo bien claro: tú no eres inservible, ni feo, ni una carga. ¿Sabes lo que veo cuando te miro?

Jimin, con los ojos llenos de lágrimas, no podía encontrar la voz para responder. Pero en su silencio, en el dolor que sentía tan abiertamente, escuchaba atentamente. Jungkook lo aferró un poco más fuerte, no queriendo dejar espacio para que Jimin siguiera destruyéndose a sí mismo.

—Veo a alguien que ha sido increíblemente fuerte toda la vida, que está criando a una niña preciosa, que sigue adelante incluso cuando todo parece desmoronarse. Eres el Jimin que siempre ha hecho sonreír a todos los que están a su alrededor, y no importa cuántas veces intentes decirme que ya no lo eres. —Jungkook lo miró directo a los ojos, sus palabras golpeando con una honestidad cruda—No necesitas a ningún alfa para validar quién eres. Nunca lo has necesitado, ni a él, ni a mí ni a nadie. No eres un omega "menos" solo porque la marca de Eunwoo se está desvaneciendo. —Dice mirando su cuello.

Jimin parece sorprenderse porque conoce ese dato. Pero no dice nada.

—No eres menos hermoso solo porque te sientes roto ahora...

Jimin sollozó de nuevo, pero esta vez no fue solo por el dolor. Jungkook seguía hablando, su voz baja, pero cargada de sinceridad.

La mano del alfa fue hasta su mentón para que no quitara la vista. Y pasó su pulgar por la mejilla para quitar otras lágrimas consiguiendo toda la atención de Jimin.

—Eres hermoso, Hyung. —Suspiró con pesar de ser débil ante quien consideraba su omega.— Siempre lo has sido. Por dentro y por fuera. Y si no puedes verlo ahora... —hizo una pausa, respirando profundamente—Entonces dejaré que lo veas a través de mis ojos. Porque para mí, siempre serás suficiente. Eres más que suficiente...incluso aunque me alejes, aunque te cases con un idiota. Para mí, eres...

Jimin parpadeó, sus lágrimas fluyendo, pero algo en sus facciones comenzó a suavizarse. No lo dejó terminar pues lo abrazó más fuerte. Las palabras de Jungkook atravesaron la oscuridad que lo envolvía, un pequeño rayo de luz que empezaba a disipar el frío que sentía dentro. Nunca había escuchado a Jungkook hablarle de esa manera, con tanta claridad y sinceridad.

—¿Cómo puedes decir eso...? —susurró Jimin, con voz temblorosa.

—Porque es la verdad, hyung. Y si no puedes creerlo ahora, entonces seguiré diciéndotelo hasta que lo hagas —respondió Jungkook, con una determinación tranquila, pero inquebrantable.

Ya casi no podía mantener el semblante seco y duro del inicio. Jimin siempre tenía ese efecto en él de ponerlo blandito, cálido y protector cuando estaban cerca.

Jimin bajó la cabeza, avergonzado, pero al mismo tiempo sintiendo una calidez en su pecho que no había sentido en mucho tiempo. El peso en sus hombros seguía ahí, pero ya no se sentía tan insoportable con Jungkook a su lado.

—Gracias —murmuró finalmente Jimin, una débil sonrisa cruzando su rostro a pesar de las lágrimas.

Era una sonrisa pequeña, frágil, pero Jungkook la vio. Y en ese momento, supo que, por ahora, eso era suficiente.

💔Más Allá De Un Corazón Roto | Kookmin Au ❤️‍🩹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora