Persiguiendo un sueño

Capítulo 32

-Ya no me regañes... me pongo un poco sentimental...

Bowen bufó tan fuerte que sorprendió a Darren.- Sabes que lo que digo es cierto... no puedes callar por siempre, qué harías si las cosas se salen de control y tienes que quedarte en reposo por más tiempo del que piensas?

-El especialista dijo que el tratamiento ha ayudado mucho... de hecho, la última semana no tuve tantas molestias...

-En eso tienes razón, pero tu estado no deja de ser delicado... debes pensar en eso...

-Por eso no quiero que Ayanga se entere...

-No quieres que él sepa porque sigues dolido... en el fondo sabes que debes aclarar todos esos malos entendidos...

-Lo sé perfectamente... tal vez lo que tengo ahora es mucho miedo...

-Es natural... te fuiste sin saber que esperabas un bebé y sin dar la oportunidad de que mi amigo y tú hablaran civilizadamente...

-Creí que era lo mejor... un continente de por medio era necesario para tratar de entender muchas cosas... y también para poder sanar...

-De verdad te lastimó tanto como para que pensaras que Zhan era su interés amoroso?

-Todo parecía indicarlo... era como una obsesión para el... quería cuidarlo a toda costa olvidándose por completo de que yo estaba ahí...

-Es algo difícil de entender, crecieron como hermanos pero en realidad no son nada...

-Exacto y aunque Zhan siguió su camino con Yibo... Ayanga no dejó de perseguirlo...

-Yo no vi eso... o al menos no sentí que fuera tan obvio...

-Crees que exagero?

-Solo tú sabes lo que vas viviste... cada pareja es un mundo...

Darren suspiró.- Jiyang debe odiarme...

-Ni lo pienses... eso no es cierto...

-Claro que sí... técnicamente tu yo somos una especie de ex novios... llegaste conmigo a Londres por cuestiones de trabajo pero me has acompañado para cuidarme por el embarazo...

-Jiyang lo sugirió desde el principio... no queremos dejarte solo en esto...

-Se los agradezco tanto...

-No tienes nada que agradecer... sabes que lo hacemos con gusto, además... seremos tíos... así que debemos consentir a ese bebé... por cierto... ya te dijeron que es?

-No quiere dejarse ver... siempre se voltea...

-Así que ese bebé es igual de terco que tú...

-Oye... no digas eso... yo no soy terco...

Los dos chicos empezaron a reír mientras se jugaban bromas. En otro tiempo, habrían sido la pareja más feliz del planeta, pero por algunas situaciones, jamás pudieron terminar de coincidir. Por eso jamás forzaron algo entre ellos y estuvieron completamente de acuerdo en mantener una gran amistad. Ahora Bowen salía con alguien más igual que el propio Darren, quien a veces se sentía tentado a llamar a Ayanga para contarle todo, pero ante sus dudas prefería enfocarse en cuidar lo mejor posible de su salud, no quería que otra desilusión le provocara algo más grave... como perder a su bebé.

*****

La tarde había caído en China, Yibo ya no regresó a las oficinas del conglomerado pero recibió varios mensajes de Haikuan con información algo preocupante, los movimientos del señor Lao eran demasiado repetitivos, había desviado grandes cantidades de dinero solo para uso personal. Aunque no podían hacer una auditoría a sus cuentas personales, varios de los movimientos coincidieron con viajes a Macao y algunas noticias sobre las apuestas del asambleísta en diferentes casinos de dicho país. El castaño indicó a su amigo que solicitara una junta con el personal de la firma Luo, con ese apoyo, tendrían todo lo necesario para presentar una demanda formal en contra del padre de Suyin. Una voz conocida lo hizo sonreír y desviar la mirada.