April
Salir con Emily ha sido increíble. Cada día a su lado siento que descubro algo nuevo, una parte de mí que nunca había conocido. Su risa, su energía, y hasta su manera de ver el mundo... todo me hace querer estar cerca de ella, aprender, ser mejor.
Encuentra belleza en los detalles más simples. Cuando paseamos por el parque con los bebés, se detiene a observar cómo se mueven las hojas con el viento, cómo juegan los niños, y cómo el cielo se tiñe de colores al atardecer. Me ha enseñado a apreciar esas pequeñas cosas que antes pasaban desapercibidas para mí.
—Mira eso —me dice, señalando las hojas que se mueven con el viento—. ¿No es hermoso cómo bailan?
La miro, un poco confundida.
—¿Bailan? Solo se están moviendo —respondo con una sonrisa.
—No, no. Tienes que mirar más de cerca. —Ella se agacha, haciendo gestos para que los bebés también miren—. Observa cómo giran y caen. Es como si tuvieran su propia coreografía.
No puedo evitar reírme.
—Eres increíble. Siempre encontrando poesía en todo.
—La vida es poesía, abril. Solo hay que abrir los ojos —me responde, mientras mira hacia el cielo, donde los colores del atardecer comienzan a mezclarse—. ¡Mira! ¡Ese naranja alla arriba es tan vibrante!
—Tienes razón. No lo había notado. —La miro a los ojos, sintiendo una conexión profunda
—Eso es lo que hacemos las unas por las otras —dice, sonriendo de nuevo—. ¡Vamos, deberíamos capturar este momento!
Ella saca su teléfono y nos toma una selfie con los bebés.
—Sonríe, mi artistas favoritos.
Su curiosidad por la vida es contagiosa; me hace querer explorar, aprender y ver más allá de lo evidente. Es como un rayo de sol que ilumina incluso los días más grises.
En casa, mientras cocinamos juntas, Emily convierte cada momento en una aventura.
—¿Ves cómo picar las cebollas hace que los ojos lloren? —dice mientras corta—. Es como una pequeña tragedia en la cocina.
—¿Una tragedia? —réplico, riendo—. Solo son cebollas.
—Sí, pero mira la historia que cuenta. La vida tiene sus altibajos, incluso en la cocina.
Una de las sorpresas más grandes que he descubierto desde que estoy con Emily es que tengo un talento oculto para el baile. Siempre me consideré un artista que se limitaba a estar detrás del micrófono, entregando mis letras al público. Pero desde que Emily me ha animado a salir de mi zona de confort, me doy cuenta de que el baile es una extensión de mi expresión artística.
Todo comenzó una tarde mientras estábamos en la sala de estar, preparándonos para un pequeño show para los mellizos. La música sonaba, y de repente, Emily comenzó a moverse al ritmo, sus movimientos eran fluidos y llenos de energía.
—¡Vamos, April! —me anima—. ¡No te quedes parada! ¡Siente la música!
—No sé si puedo hacer eso, Emily. Solo soy buena cantando.
—Pero el baile puede ser una forma maravillosa de expresar lo que sientes. ¡Inténtalo!
Con un suspiro, decidí dejarme llevar. Empiezo a moverme lentamente, mis pies apenas siguen el ritmo. Emily se acerca y me toma de la mano, guiándome.

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Inevitable
ChickLitEn este especial de ¿Quién enamora primero?, Emily Masón empieza a trabajar como niñera de los mellizos Carter y no solo aprenderá a como cuidarlos sino a como lidiar con la repentina atracción que siente hacia April, la hermana mayor de ellos. Jun...