En un día que debería ser el más feliz de su vida, él la observa caminar hacia el altar, y su corazón se quiebra al darse cuenta de que no es el hombre que la acompaña. Durante seis años, compartieron risas, sueños y momentos inolvidables, pero la r...
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Al llegar a casa, el corazón aún palpitante por la emoción de la noche, saqué mi teléfono y abrí la conversación con Clara.
Era mi mejor amiga, la única persona que realmente conocía mis demonios y mis éxitos, así que no podía esperar para compartirle la noticia.
Con los dedos temblorosos, escribí:
"¡Clara! Tienes que escuchar esto. Conocí a una chica...
y después de solo cuatro meses, ¡ya es mi novia!"
Presioné "enviar" y me senté en el borde de mi cama, esperando su respuesta con una mezcla de nervios y anticipación.
Clara siempre había sido la voz de la razón en mi vida, así que sus reacciones eran muy importantes para mí.
No pasó mucho tiempo antes de que mi teléfono vibrara. Abrí el mensaje de inmediato:
"¿Qué? ¿Tú? ¿Con una chica? No puede ser, Dylan.
Nunca me habías hablado de alguien. ¿Qué está pasando?"
No pude evitar sonreír al leer su sorpresa. Clara siempre había sido escéptica sobre mis habilidades para las relaciones, y tenía razón en muchos aspectos.
La verdad era que hasta ese momento, nunca había sentido que alguien realmente valiera la pena.
"Es diferente. Se llama Keili y es increíble.
Es como si siempre hubiera estado ahí, incluso antes de conocerla.
La conexión que tenemos es... especial."
Escribí con la esperanza de que entendiera lo que sentía. Cada palabra que usaba me acercaba a lo que había experimentado esa noche.
"Wow, eso suena profundo. ¿Qué es lo que te gusta de ella?"
Preguntó Clara, y su pregunta me hizo reflexionar.
"Es su forma de ser, su manera de ver el mundo. Puedo ser yo mismo con ella, sin pretensiones. Y cuando está cerca, me siento como si estuviera en casa."
Clara, en su estilo característico, me bombardeó con emojis de sorpresa y felicidad.
"Dylan, ¡esto es enorme! Te he visto lidiar con tantas cosas, y es genial saber que finalmente encontraste a alguien que te hace sentir así. ¡No puedo esperar a conocerla!"
Mientras leía sus mensajes, una oleada de alegría me invadió. Por fin estaba experimentando algo que valía la pena.
"Sí, definitivamente tienes que conocerla. Espero que te caiga tan bien como a mí."
