La noche me mostró tus ojos,
y en cada página veo tu rastro,
un eco de palabras que nunca dije,
pero que ahora brotan de este cuaderno,
esperando el momento justo.
Son las hojas en blanco,
los versos que aún no te leo,
los silencios entre cada línea
donde guardo lo que siento,
en fragmentos,
en susurros,
en pausas necesarias.
Tú, mi chica de los libros,
la que convierte cada página en un misterio,
y cada día, en un capítulo nuevo.
⚠️Se estarán agregando algunos poemas que Dylan escribió y que cautivaron a Keili espero que les gusten.
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Amores que aprenden a soltar
RomanceEn un día que debería ser el más feliz de su vida, él la observa caminar hacia el altar, y su corazón se quiebra al darse cuenta de que no es el hombre que la acompaña. Durante seis años, compartieron risas, sueños y momentos inolvidables, pero la r...