"Te amo Miluchi"Fue lo ultimo que resonó en mi cabeza antes de que mis ojos se abrieran, y pudiera ver la habitación blanca, con luz tenue y un silencio tranquilo. Mi cuerpo dolía un poco, no iba a mentir, pero creo que gran parte de esa molestia se disimulada por el sedante y los calmantes. Mi garganta estaba seca, mis ojos pesaban ligeramente como si no hubiese dormido en días, y mi cabeza retumbaba un poco.
Perdida, mire a mi costado encontrándome con una cabellera rubia. Guido estaba dormido, con una de sus manos puesta en mi vientre y la otra sobre el dorsal de mi mano. De apoco empecé a recordar todo, un nudo se instaló en mi garganta, pero sorpresivamente no podía llorar, solo sentía un vacío en mi pecho, como si algo, o mas bien alguien, me faltara. Ese era Thomi.
Los recuerdos del sueño que tuve fueron fugaces en mi mente. Se sintió tan real, y tan único, como si de una despedida se tratase. Esa despedida que no pudimos tener, ya que en un abrir y cerrar de ojos, el ya estaba muerto a mi lado. Dudo poder borrar esa imagen por un largo tiempo...
Sin hacer mucha fuerza, puse mi mano en el pelo del rubio, acariciando suavemente tratando de despertarlo. Sus ojos se abrieron instantáneamente, y su cabeza se alzó mirándome atónito.
—Hola...—le susurre con mi garganta raposa, y una mini sonrisa cansada.
—Mi amor...—al igual que yo, hablo en tono bajo, subiendo una de sus mano hasta mi cabeza para acariciarme suavemente. —Hola...—se enderezó, y se acercó mas a mi para dejarme un beso en mi frente.
—Decime que esta bien...—cerré mis ojos ante el tacto de sus labios, soltando algunas lagrimas. —El bebé, decime que esta bien...—puse mi mano sobre la suya, que por nada del mundo se movió de mi panza.
—Tranquila...—limpió algunas lagrimas con su dedo.—Esta bien...muy bien.
Sonriendo, volví a cerrar mis ojos dejando salir toda la angustia que tenía en el pecho. Eso era lo que necesitaba, un lugar seguro para poder llorar, y eso era al lado de Guido. Basto con solo un par de palabras, y unas leves caricias, para que pueda quebrar en llanto, sacando todo lo que sentía para afuera.
—Se murió...—tape mi cara con una de mis manos, y Guido se sentó a mi lado, acunándome entre sus brazos para que pueda esconderme en su pecho. —Yo lo vi ahí antes de desmayarme otra vez...no puedo sacarme esa imagen de la cabeza.
Sabía que él también estaba derramando alguna que otra lágrima, mientras presionaba sus labios en mi cabeza, y acariciaba mi espalda.
—Fue mi culpa...—no pude hablar mas por el llanto excesivo que tenía.
—No Mia, no fue tu culpa. —negó enseguida.
—Si, si yo no le hubiese dicho lo del embarazo, el no se hubiese distraído y chocado. —lo mire relamiendo mis labios.
ESTÁS LEYENDO
Cicatrices || Guido Armido Sardelli
FanfictionQuiero llevarme cada momento A todas partes, sin documentos Y voy buscando algún pretexto Para soltarte, y no lo encuentro