Un Corazón Dañino #3 © [COMPLETA]✅

Capítulo 20

KAIRA

—¿Te dijo algo Damián?

La pregunta me toma por sorpresa, cierro la puerta y me cuesta trabajo verle la cara cuando anoche él me folló de una manera que me hizo tocar el cielo y el infierno al mismo tiempo.

—Siento lo que hice, soy muy curiosa, no es mi intención ocasionar problemas —digo rápidamente.

Él frunce el ceño.

—Eso no responde a mi pregunta —gruñe.

Me muerdo el labio inferior.

—Solo dijo que la rubia de ojos grises se llama Lilibeth y que es la mejor amiga de ambos —confieso—. Solo eso.

Asiente lento y suelta un suspiro.

—Anoche —levanta la mirada—. Solo fue sexo, quiero dejar las cosas claras, fuiste tú quien se me abalanzó primero.

Mis mejillas se calientan al recordarlo.

—Lo siento —siseo.

Hay un grueso silencio entre los dos.

—Yo no.

Su respuesta me sorprende y hace que mi estúpido corazón lata con fuerza, alzo la mirada y sus ojos se clavan en los míos, hay deseo, intensidad... lujuria.

—Pero te repito lo mismo —añade—. Es solo sexo, no tengo la intención de que confundas las cosas, hice lo que me pediste, fue bueno.

Asiento.

—Solo quería...

—No es necesario que me lo digas, entiendo.

Artemis se pone de pie.

—Te voy a ayudar en lo que pueda, solo no confundas las cosas, las mujeres suelen hacerlo.

Comienza a caminar hacia la puerta.

—¿Y qué pasa si quiero que me vuelvas a follar? —la pregunta brota de mi garganta sin que lo pueda evitar.

Artemis se detiene.

—No tengo problema con ello, si sabes diferenciar que solo seríamos amigos con derechos —dice.

—¿Amigos con derechos?

—Solo follar, no somos novios, pareja, nada, y el que estemos follando no quiere decir que no podamos salir con alguien más.

Guardo silencio, la verdad es que no había pensado en ello, estar con otro... no me resulta muy apetecible ni cómodo, Artemis ya me vio desnuda, la idea de que otro lo haga, me aterra.

—Entonces está bien si follo con otros —musito para mí misma.

—Claro —responde, pero en tono hostil, como si hubiera algo que le moleste.

Está por cruzar el umbral de la puerta, cuando volteo y le agarro del brazo.

—¿Y qué pasa si quiero follar ahora?

Se detiene en seco, al darme cuenta de mi error, retrocedo, porque estoy rogando por sexo.

—Olvídalo —susurro.

Artemis se gira y tensa la mandíbula de manera dolorosa.

—Si quieres algo solo tienes que pedirlo, pero no pienso follarte ahora, no cuando no lo quieres realmente, a más —desciende su mirada hacia mi coño—. Debes estar adolorida, un baño de agua caliente ayuda, hazlo.

Y diciendo esto sale de la habitación sin más. Haciendo que me sienta apenada. De cualquier manera, hago lo que dijo, me doy una ducha de agua caliente, estoy adolorida, y cuando termino, salgo envuelta en una toalla, salgo y encuentro una muda de ropa nueva sobre la cama, se trata de una falda plisada, zapatillas converse, un crop top rojo, me visto y al terminar, recojo mi cabello rojo en un moño alto.