—¡Lou, se nos acaba el tiempo! —exclamó Elías, lanzando las manos al aire—. El festival termina en tres días. ¡Tres! No puedes seguir así, tienes que decirle a Marius lo que sientes.
Lou suspiró y apretó los labios, claramente incómodo.
—No sé qué siento —sonando cortante y un poco triste—. No es tan fácil como tú crees.
Elías bufó y se dejó caer en el sillón a su lado, rodando los ojos.
—¿Qué no es fácil? ¡Es solo decirle “me gustas, Marius, quiero que seamos novios”!. Ni siquiera necesitas un discurso de Shakespeare, solo unas pocas palabras. ¿Es que quieres que te escriba un guion?
—No es eso, Elías. Es solo que… no sé si estoy listo para decírselo. Tengo miedo de arruinarlo. De que no sea lo que él espera.
—¿Arruinarlo? —repitió, casi riéndose—. Lou, Marius está casi enloquecido por ti, ¿y tú preocupado por arruinarlo? ¡Si te falta y se lo digo yo mismo!
—No lo harías —cruzando los brazos.
Elías levantó las manos como si se rindiera.
—Lo haré si es necesario. —Le lanzó una mirada seria—. Lou, esta es tu oportunidad. El festival, la prensa, los momentos juntos… Si lo dejas pasar, podrías arrepentirte. ¿De verdad quieres eso?
—No lo sé. Solo… quiero que sea perfecto. Que Marius esté seguro de que siento lo mismo que él. Y no sé si puedo decirle algo que ni yo entiendo completamente.
—Lou, ¿sabes qué? El amor no es perfecto ni tiene que serlo. —Lo señaló con firmeza—. La única manera de arruinarlo es que sigas sin hacer nada. Y te lo digo con todo el cariño del mundo, amigo, ¡eres un completo tonto si no haces algo ahora!
Lou soltó un suspiro, dejando caer su cabeza en sus manos.
—¿Y si me rechaza? —preguntó en voz baja.
Elías soltó una risa, como si Lou hubiera dicho el chiste más absurdo.
—¡Por favor! ¡Marius te ha mirado como si fueras su cielo y su tierra desde el primer día! —Le dio una palmadita en la espalda —. Si esto no es amor, no sé qué es. Anda, déjate de tonterías, ¿quieres?
—Está bien —dijo al final, suspirando de nuevo—. Pero prométeme que no harás nada impulsivo.
—No prometo nada. Pero te prometo que cuando tomes la decisión, estaré ahí para animarte… o empujarte.
Lou salió de su habitación y se dirigió a la sala. Encontró a Saar en el sofá, viendo la televisión con una expresión tranquila, demasiado tranquila para el caos interno que él sentía.
—¿Dónde está Marius? —preguntó, intentando sonar casual, pero había un tinte de urgencia en su voz.
—Se fue a pasear.
—¿A pasear dónde?
Saar suspiró, visiblemente molesta por su insistencia.
—No sé, Lou. No soy su guardaespaldas. Se fue, ¿sí?.
Sin esperar más explicaciones, Lou giró sobre sus talones y salió corriendo del hotel, ignorando a los fans que intentaban acercarse a él. Su mente estaba demasiado enfocada en una sola cosa: encontrar a Marius. Apenas notaba las miradas a su alrededor o los flashes de las cámaras, y cuando finalmente llegó al auto, se apresuró a subir y le pidió al chófer que lo llevara al parque cerca del restaurante Belle Étoile, el lugar donde Marius había mencionado alguna vez que le gustaba ir a despejarse.
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♡ I REALLY LOVE YOU ♡
Fiksi PenggemarDespués de grabar "Young Hearts", una película que explora los primeros amores, Lou comienza a experimentar una atracción inesperada hacia su compañero de set, Marius. A medida que ambos viajan de festival en festival para promocionar la película, L...