Enséñame a amar (yaoi)

Capítulo 30: Velada.

"Día doce sin ti: 

he conocido a alguien, soy yo. Voy a darme una oportunidad."

Tenía a ambos gemelos comiendo hamburguesas en la habitación junto con vasos repletos de jugos y la televisión encendida, me daba la impresión de estar junto a niños felices de tener una "cajita feliz" en algún McDonald's o algo por el estilo.

-¡Qué casualidad!- Shinem sonrió con un poco de queso amarillo en la nariz mientras seguía masticando.

-Sí, nuestro primer amigo en el campus es novio del chico que salvamos...- continuó Tom mientras comía con tranquilidad a diferencia de su hermano que parecía que comía con desesperación y brutalidad.

-Sí...- Sonreí algo incómodo por el término "novio para referirse a Louis y a mí, oficialmente no éramos novios, tampoco Louis había terminado con Damián, entonces... ¿qué éramos?

-¡Eres un mal novio, mal novio!- Shinem me señaló repetidas veces con su mano libre.

-Lo sé....- Rasqué mi cabeza con mucha pena, me había dado por enterado del echo que Louis fue atacado por personas que ni si quiera conocíamos; tenía sospechas de que Cez había esparcido y ordenado que se deshicieran de Louis. Ya sabes lo que dicen "Con dinero baila el perro, con sexo el mundo entero."- Pero, gracias por salvarlo.

-No es nada.- Respondieron ambos al mismo tiempo.

-Tienen un acento muy peculiar...- Habló Louis colocando un jarrón de agua entre ambos para después sentarse a mí lado- ¿De dónde son?

-Somos de Rusia....- Respondió Thomas limpiándose su boca.- Pedimos un intercambio por... problemas familiares.

Narra Shinem

El ambiente ¡era muy agradable!

El pequeño chico de pelo marrón parecía muy enamorado del chico de cabello azul, ¡podía jurar que los corazoncitos frotaban a su alrededor!; sin embargo Toby parecía sumamente incómodo por su presencia tan melosa.

-¡La comida de aquí es deliciosa!- Exclamé señalando una papa frita, levantándola hacia el cielo.- ¡Puede que me ponga obeso por tanta grasa, pero vale la pena!

-Hasta crees que vamos a comer pizzas, hamburguesas y demás todos los días...-Me regañó mi hermano mirándome de reojo tras su cabello rosado.

-¿Por qué no? No es ningún delito ser gordo... ¡viva la gordura!

Mi celebración hacía la comida con grasa y poco nutrientes fue acallado por golpes fuertes en la puerta que la hacían retumbar por toda la habitación haciendo que las miradas fueran aquel pedazo de madera.

-¡Abre la puta puerta Louis!- Gritó la voz de un hombre mayor haciendo que Louis de inmediato se pusiera detrás de Toby, tenso.

-¿Qué pasa...?- Susurré tomando de la mano a Tom y haciéndonos levemente para atrás; de inmediato me instinto me hizo ponerme a la defensiva.

-¡Abre la puta puerta!- Gritó de nuevo furioso, claramente se escuchaba al hombre en un severo estado de alcoholismo.

-¡Lárguese o vamos a llamar a la policía!-Gritó Toby fuerte, tratando de imponer sin atreverse a acercarse a la puesta.

El sujeto trato comenzó a mover la perilla con desesperación hasta que esta se abrió dejando paso al sujeto con una botella en mano y tambaleándose.

-Mira nada más...otras zorritas están aquí...-Hipeó mirándonos a mi hermano y a mí de arriba abajo mientras se relamia sus gruesos labios, me entraron terribles ganas de lanzarme sobre él y asesinarlo.

-Cierra el maldito hocico, malparido.- Susurré molesto por dichas expresiones.

-Papá...-Comenzó a gimotear Louis, mientras trataba inútilmente de hacer que se calmara. - Por favor vete, no les hagas daño...

El señor aventó su botella contra el piso haciéndola volar en mil pedazos con tanta furia que el rostro le comenzaba a sudar y a ponerse rojo poco a poco, Toby reaccionó de manera violenta y brusca hacía el sujeto con un puño directo en la cara.

De inmediato tomé la mano de Tom haciéndolo para atrás y el me devolvió el apretón fugaz.

-¡Hijo de puta!- El sujeto se levantó estampando su puño en el estómago de Toby derribándolo de inmediato, los golpes empezaron a lloverle en la cara haciendo que la saliva y sangre de Tobías se empezarán a expandir por el suelo.

-¡Suéltalo! – Gritó Louis en pánico tomando un jarrón siendo lo primero que vio estrellándoselo en la cabeza haciendo volar el objeto de porcelana en pedazos sobre la propia cabeza del sujeto.

Toby se revolcó en el suelo unos segundos, desorientado y sujetándose el rostro de manera lenta, sus ojos se volteaban hacía atrás y hacía los lados tratando de ubicarse. Tom de manera rápida se acercó a él agitado para tratar de ayudar a Tobías a ponerse de pie; yo volteé de nuevo al frente encontrándome con el aparente padre de Louis y Louis frente a frente, el sujeto comenzaba a gotear de la cara sangre de manera lenta.

Lo siguiente casi pasó en cámara lenta, su padre le tomó del cabello arrojándolo al piso de una manera tan brusca que le sacó el aire de los pulmones. En cuanto el tipo se puso de pie para encestarle una patada yo también me alancé contra él arañando su rostro, escuché el sonido de su grito en cuanto mis uñas se encajaron en su cara y la rasgaron, escuché claro como mi hermano desde atrás gritó mi nombre y escuché claro cuando me arrojó contra la pared. Mi cabeza golpeó esta de manera brusca y un pitido inundo mis oídos desorientándome totalmente.

Louis gritó (o eso creo yo) cuando le volvieron a tomar de los cabellos, pataleó y arañó la mano de su padre que comenzaba a arrastrarlo a la salida.

Toby trató inútilmente de ponerse de pie haciendo que cayera de lado, su cara comenzaba a hincharse de forma grotesca y poco natural; aun así reflejaba toda la impotencia que le causaba la situación.

Pronto mi cabeza fue tomada entre las manos de Tom, quien me miraba con terror llamándome una y otra vez.

-¡No te escucho!- Grité tratando de liberarme del infernal sonido chirriante en mis oídos.- ¡No dejes que se lleve a nuestro amigo!

Tom me miró sorprendido unos momentos, pero no dudo en asentir y salir corriendo dejándonos ahí a Toby y a mí.

Toby fue el primero en que pudo levantarse, con el rostro sangrado y una inminente furia por la cual sacar. Se acercó a mí en lo que el sonido iba disminuyendo de apoco junto con el mareo, me tomó de los hombros y un brazo tratando de levantarme.

-Shin, ¿estás bien?- Logré escuchar a duras penas, solo pude asentir antes de que me recostara en la cama.- Escucha, tengo que ir por Louis, por favor trata de no moverte mucho.

-Es mi nuevo amigo...- Pronuncié medio levantándome con esfuerzo, a pesar de que yo también me iba de lado.- Voy contigo.

Toby no me esperó, solo emprendió a correr por los pasillos y a duras penas comencé a seguirlo aun tambaleándome para alcanzar a mi hermano y al sujeto.

Lo que me encontré fue algo que me alivió el alma.

Resulta que no habían podido correr tan lejos, mi hermano alejaba a Louis de apoco con la nariz sangrando mientras el mismo tipo que venía con nosotros en el autobús sometía al padre de Lou en el piso.

-¡Suéltame maldita sea!- Gritó siendo sometido por el chico de cabello negro que sostenía a este con fuerza..- ¿¡Quién te crees que eres?!

-Jon Snow, estudiante de Derecho.- Dijo con toda la calma del mundo.- Y voy a hacer que te den muchos años de prisión por esto.