Capitulo 4: Varitas extraordinarias

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Hagrid explicó mientras se dirigían a la tienda, que la varita elige al mago.

Al entrar en la tienda, los recibió un hombre sonriente y amable, después de dos o tres "es Harry Potter..." se dispuso a buscarle una varita.

-¿Con que mano sujetas la varita?-le preguntó amablemente el hombre.

-Con la derecha-contestó el.

Extendió el brazo y el señor Ollivander se lo midió, tras probar con varias varitas, bajo la expectante mirada de curiosidad de su hermana, después de varios intentos mas, le dio otra.

-Madera de acebo, 11 pulgadas y pluma de cola de fénix-le entregó la varita y esta soltó chispas doradas.

-Curioso-dijo el hombre.

-¿Por qué es tan curioso?-preguntó Harry.

-Recuerdo todas la varitas que e vendido señor Potter, cada una de ellas y resulta que de donde se saco la pluma de fénix de su varita se extrajo una mas. Solo una más. Y es muy curioso que usted estuviera destinado a esta varita cuando su hermana fue la que le hizo esa cicatriz - y volvió a señalar la cicatriz de Harry, estábamos mudos-creo que podemos esperar grandes cosas de ti-se giró hacia Abby y reparó en ella por primera vez.-Hola preciosa... valla te pareces tanto a Lily... ¿es amiga del señor Potter?

-Si, soy Abby Po... Jones, Abby Jones-rectificó.

-Bien, pues es tu turno ¿Con que mano sujetas la varita?

-Derecho-e imitó a su hermano extendiendo el brazo para que Ollivander se lo midiese, probó con una de pluma de fénix. Nada.

Luego con otra de cabello de unicornio. Nada.

Fibras de corazón de dragón, nada.

Cabello de veela-no sabía que era-pero tampoco ocurrió nada, estaba siendo mas difícil que a Harry, la mirada de ella se posó en una caja que estaba alejada, y le pareció que...

-Eh, Harry-llamó en un susurro mientras el señor Ollivander buscaba alguna mas-¿Esa caja esta brillando o es cosa mía?

-No la veo brillar-replicó el tras fijarse en la caja que Abby le señalaba.

-No importa, seguro que fue una ilusión óptica-Abby desilusionada, probó la nueva que le traía el dependiente. Nada.

-¿Y esa caja?-preguntó señalando la que aun le parecía brillar.

El hombre la miró perplejo y asintió, la cogió las tres que había ahí, y la miró a los ojos, como queriendo distinguir algo, le entregó la primera y no sucedió nada, Abby empezaba a cansarse, entonces le entregó la segunda y lanzó chispas doradas.

-¡por fin!-se alegró la chica y miró su varita.

-Realmente curioso...-el hombre la miró, ahora con admiración, como hace un momento lo había hecho con Harry-Madera de roble, 18 cm y núcleo de pluma de fénix.

-¿Y por que es curioso mi caso?-preguntó la niña.

-Por que esa varita perteneció ni más ni menos que a Godric Gryffindor.

-Ah...-empezó la chica, pero no terminó; no sabía quien era Godric Gryffindor (aunque le sonaba el apellido de algo) y por la cara de Harry, ella supo que el tampoco tenía ni idea.

Salieron de la tienda, y los chicos se cambiaron las varitas un momento para fijarse mejor.

-Los dos tenemos pluma de fénix-observó Harry mientras Abby le pasaba su varita-¿será porque somos hermanos?

-No lo creo-respondió Hagrid-pero tambien Quien-vosotros-sabéis tiene el mismo núcleo, quizá sea una señal, Abby has tenido suerte con el señor Ollivander, pero memorízate Jones, casi nos descubre, no, repito, No queremos que nadie se entere de quien eres tu ¿de acuerdo?

-¿Y que pasa si se me escapa?-preguntó Abby con curiosidad.

-No debe escapársete JAMAS, pero el Señor Tenebroso intentaría matarte igual que con...

Se calló y cambió de tema.

-Aquí tenéis vuestros billetes de tren para Howgarts-Hagrid les entregó uno a cada uno-debeis estar en la estación de Kings Crows el 1 de septiembre a las once en la estación 9 y ¾.

Hagrid los dejó a cada cual en su casa.

Abby:

Llegué a la hora de comer, pero casi no tenía hambre de la emoción (y porque habíamos comido ya en el Caldero Chorreante) asíque me tumbé en mi cama (creo ser la única niña que tiene habitación propia) me senté en la cama para digerir con tranquilidad los sucesos, y solté a mi lechuza por la habitación, cuando se posó un momento a mi lado, le acaricié las plumas pensando...

Durante mucho tiempo no he tenido ni idea de mi familia, yo di por sentado que me habían abandonado sin mas, y me sentí mal por ello, porque mis padres habían dado la vida por mi recuperado hermano mayor, según Hagrid, a mi me habían encontrado entre los escombros de donde debía estar la sala de estar, y el cadáver de mi padre a unos pocos metros.

No era muy alentador, pero por lo menos sabía que aunque solo fuera durante un año, tuve una familia que me quiso. En cuanto a Harry... no se que pensar, a mi me parece un chico genial, y me alegra saber, que no estoy sola, pero ¿el querrá una hermana? No se, me ha tratado bien, y tal, pero aun no le conozco, y probablemente pase de mi, creo que soy algo pesimista, claro que siempre he estado expuesta a los rechazos, que la señora Grace estaba controlando.

Me acordé de la despedida de Harry, me dejaron el y Hagrid delante del orfanato, con mis paquetes de formas raras y una jaula con una lechuza.

-Bueno, supongo que nos veremos el 1 de septiembre-me dijo el.

-Si... ahora que se que tengo un hermano, bueno-no encontré palabras y solamente le sonreí, le tendí mi mano para que me la estrechara, pero Harry me abrazó, no me molestó para nada, es mas: estaba encantada, le abracé a mi vez, y se me escapó una lagrimita que me apresuré a limpiar, cuando nos separamos, me metí hacia adentro.

-Hasta el día 1.

Sinceramente, no se si el abrazo fue por la emoción, pero... ¡Eh! Por la ventana acaba de entrar una lechuza blanca con manchas negras... ¡es la de Harry! Lleva un mensaje en una pata bien atada, con cuidado, se la quito. En la carta me está saludando ¡a mi! A su hermana menor, de la que nunca ha sabido, me lleno de emoción y le respondo.

Nos comunicamos así durante todo el día, ya conozco mas o menos a mi hermano, y me encanta, me parece que me voy a llevar muy bien con el... y pensar que aun queda una semana para vernos de nuevo...

Tambien he ojeado los libros de magia, y en ello me iba a poner, acabo de decirle a la señora Grace que me lleve a la estación y a accedido, cuando veo que allí me espera Hedwing (se llama así la lechuza de Harry) cojo el mensaje rápidamente.

"Hola Abby, ¿le has pedido ya que te lleve a King Crows? A mí si me van a llevar, espero vernos allí pronto. ¿Cómo está Wings? (mi lechuza) Contesta pronto, si no te pueden llevar, puedo asustar a los Dursley para que te lleven con nosotros.

Harry"

Le respondo afirmativamente, que ganas de verlo, suelto a Hedwig y a Wings que casi siempre se empeña en acompañarla. Bueno, mañana es el gran día.


la hermana de harry potter y la piedra filosofalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora