la hermana de harry potter y la piedra filosofal

Capitulo 35: Fuego contra Fuego

-Venimos a rescatarte, por si no te habías dado cuenta-dijo Ryan, avanzó hacia mi y me quitó el hielo.

-¿Qué narices...?

-No es momento de explicaciones-dijo Marian.
Miró alrededor para ver dónde estaba Quirrell y lo vio doblado de dolor, mirándose
los dedos, que se ampollaban ante sus ojos.
—¡ATRÁPALO! ¡Atrápalo! —rugía otra vez Voldemort, y Quirrell arremetió
contra Harry, haciéndolo caer al suelo y apretándole el cuello con las dos manos... La
cicatriz de Harry casi lo enceguecía de dolor y, sin embargo, pudo ver a Quirrell
chillando desesperado.
—Maestro, no puedo sujetarlo... ¡Mis manos... mis manos!- Y Quirrell, aunque
mantenía sujeto a Harry aplastándolo con las rodillas, le soltó el cuello y contempló,
aterrorizado, sus manos. Abby vio que estaban quemadas, en carne viva, con ampollas
rojas y brillantes.
—¡Entonces mátalo, idiota, y termina de una vez! —exclamó Voldemort.

-¡No!-chillé

Meson, Ryan y Marian se habían quedado paralizados un momento, ellos le tenían terror solo a su mención.
Quirrell levantó la mano para lanzar un maleficio mortal, pero Harry,
instintivamente, se incorporó y se aferró a la cara de Quirrell.
—¡AAAAAAH!
Quirrell se apartó, con el rostro también quemado, y entonces Harry y Abby se dieron cuenta:
Quirrell no podía tocar su piel sin sufrir un dolor terrible. Su única oportunidad era
sujetar a Quirrell, que sintiera tanto dolor como para impedir que hiciera el maleficio...

-¡No!-grité, sabía que a mi hermano le estaba doliendo mucho, asi que avanzé, Voldemort debío darse cuenta de nuestra presencia, porque ordenó a Quirrel que dejara a Harry un momento.

Marian formó un huracán que alejó a Quirrel/Voldemort de mi hermano, corrí hacia el.

-¿Estas bien?-le pregunté.

-¡Cuidado!-me advirtió Meson.

Miré hacia Quirrel y una luz roja se dirigía a mi, puse una vez mas mis brazos en cruz y el muro de fuego detuvo el ataque.

-Interesante-rió Voldemort-asi que las leyendas sobre los Guardianes de los Elementos eran ciertas... Serían unos buenos aliados, pero primero mata al chico.

Quirrel apuntó a Harry, pero Ryan le lanzó a Quirrel un chorro de agua potente.

-Solo hay una cosa que podemos hacer-dije después de un rato luchando, éramos mas, pero Voldemort era mas poderoso.

-No-negó Marian cuando comprendió-no sobrevivirás.

-Es nuestra unica oportunidad-contesté.

-Pero... ¿te acuerdas de lo que te dije? Ademas...eres muy joven, ¡te matará!

Los demás clavaron la vista en mi.

-¿Qué vas a hacer?-preguntó mi hermano mirandome con miedo.

No contesté, en ese momento, Quirrel lanzó un hechizo con el que Marian, Meson y Ryan quedaron atados con una especie de cadenas, y Quirrel intentó atacar a Harry.
Harry se puso de pie de un salto, cogió a Quirrell de un brazo y lo apretó con fuerza. Quirrell gritó y trató de empujar a Harry. Si no actuaba pronto, mi hermano moriría.

Respiré hondo y traté de concentrarme, cerré los puños y solo saqué los dedos indice y corazón, y puse los de la mano derecha en mi frente y con los de la otra mano apuntaba a Quirrel (para ser mas exactos a su otra cabeza) y cambié las manos de posición varias veces, mientras me concentraba en lo que quería hacer y de mis manos salían destellos de luz plateados, entonces cuando estaba a punto de acabar pronuncié:

-Hechizo Transfusor.

Una llama dorada salió de mi, y todo se puso negro, y aparecí en un lugar donde no veía nada mas que a Voldemort, que sonreía malévolamente.

-No no puede ser: eres una Potter. Oh... tu debías ser la cosa que intentó esconder tu padre.

-Y lo hizo bien-estaba segura de que mis ojos eran de nuevo castaños, y una bola de fuego le impactó (a pesar de ser solo una especie de niebla)

-Bueno, seas Potter o no, vas a morir igualmente, debías saberlo antes de hacer el hechizo.

-Era totalmente consciente-puso una mueca de extrañeza, tan rapidamente que no se si me la he imaginado.

Me lanzó un hechizo y me apresuré a atacar.

Harry:

-¡Abby!-mi hermana ha dicho el hechizo, una bola de fuego había salido de ella y se ha desplomado en el suelo bocabajo con los brazos delante, no se mueve. Intento acercarme, pero Quirrel me corta el paso, cogí su brazo y lo apreté fuertemente, mientras mi cabeza parecía que iba a estallar, y Quirrel gritaba como si lo estuvieran matando. No podía ni ver casi, solo puedo oir los gritos de Quirrel, y Voldemort gritando ¡Matalo! Y otras voces, creo que en mi cabeza que gritan mi nombre. Sentí como el brazo de Quirrel se iba soltando, sabía que estaba perdido y probablemente no saldría de esta.No se que pasa con Quirrel, aunque ya no siento mis fuerzas, me arrastro hasta mi hermana, y le doy la vuelta, le quito el pelo de la cara, y veo que sus ojos estan cerrados, la muevo con insistencia, no se mueve, no estoy seguro de que respire.

-¡Abby!-vuelvo a gritar.

-No puedes hacer nada Harry-dice la voz de Marian desde la pared donde esta atrapada, su voz esta preocupada-ahora mismo está luchando por todos nosotros.

Miro hacia Voldemort, que ya no es mas que una sombra y descubro que su cabeza se mueve como si le estuvieran atacando.

Todo se estaba oscureciendo, antes de que todo fuese negro, cogí el dedo indice de mi hermana, como ella hacía conmigo. Y todo se oscureció, y caía, caia...