Brave

Capítulo 27. Alarma Negra.

Narra Will

Me levanté lo más temprano que mi consciencia me permitió, había dormido abrazando a la testadura de mi novia fuertemente contra mi toda la noche, pero veo que no ha servido de nada cuando no la encuentro por ninguna parte, solo veo una nota firmada por ella.

Ante todo, te quiero.

E.

Doy un golpe en la pared mientras maldigo.

-¿Will?

Allison ha aparecido en la puerta de mi habitación, pero no pasa de ahí.

-Se ha ido, maldita sea, es jodidamente estúpida y se ha ido.

-Ella solo quiere arreglar las cosas...

-¡Hay mas maneras, joder! Nos ha dejado a todos, me ha dejado a mí, Allison, por su maldito egoísmo y sus ganas de sentirse una heroína.

-No digas eso sobre ella, Will, no es justo.

-¿Que no es justo?-grito, levantando los brazos y soltando una carcajada.

-¡No!-dice con un grito que puede haberse escuchado a manzanas y me deja paralizado. Me siento en el borde de la cama, visiblemente desesperado-No es justo porque tú no sabes por lo que está pasando ella. Sí, es cierto que quiere pasar a la acción demasiado pronto y sin pensar, pero su hermano lleva días desaparecido y por una vez que tenemos una mínima pista de dónde puede encontrarse le decís de esperar. Ella está desesperada y tú, William, su novio, la persona que más debe comprenderla, cuidarla y quererla, no te has dado cuenta. Para ella es un golpe muy duro y me extraña que no haya ido a por su hermano antes.

Lágrimas de pura desesperación se acumulan en mis ojos, paso las manos por mi cara desesperado a niveles que nunca pensé. Tiene razón, tiene maldita razón.

No he sabido cuidarla, y me maldigo por ello.

Allison recorre la habitación y se sienta a mi lado, pasando su brazo al rededor de mis hombros para intentar consolarme. Pero ahora mismo solo la necesito a ella, y no está.

-Lo siento, Allison, tienes razón. Y sé lo que tenemos que hacer

Por supuesto que lo sé, perfectamente, y no pienso esperar un segundo más.

-Vamos al salón, Allison, hay que dar una Alarma Negra a la Agencia.

-Pero Will, no podemos, no tenemos pruebas fijas y...

-No, pero tenemos que hacerlo. Terminemos con ésto de una vez por todas.

***

Cuando están todos despiertos (cosa no muy difícil, después de los gritos que hemos pegado Allison y yo) Les hablo de lo que tengo pensado.

-Pero Will, no podemos hacerlo tan a la ligera.

-Eso le dijimos a Emma-replica Allison, a la que he logrado convencer con facilidad-y ahora puede morir.

Muerdo mis labios, intentando expulsar esas palabras de mi cerebro. Lo sé, por supuesto que lo sé. Pero escucharlo en algo muy distinto, y asumirlo otra cosa completamente impensable.

-Peter, no dejemos pasar ésto por más tiempo, por favor.

Le miro, suplicándole con los ojos que haga esa maldita llamada telefónica, y al final acepta.

Coge el móvil, marcando un solo número, dice algunas claves y al final cuelga.

-Ya está hecho, pongámonos en marcha.

Todos nos preparamos con nuestros uniformes y armas, varios coches llegan a mi casa, pero yo voy en mi moto. Llegamos a un almacén bastante viejo, el sitio perfecto.

Bajo de mi moto, y un hombre de aspecto mayor y cansado viene a hablar conmigo. Es miembro de la junta directiva.

-Espero que no sea una tontería, Anderson.

-Confíe en mi, Johnson, erradicaremos a los Escorpiones ésta misma tarde.

Intento creerme mis propias palabras, se que no es posible que terminemos con todo ésto hoy. Mejor dar buenas expectativas y subir el ánimo de todos.

-Y sobre Andrew... no me lo puedo creer.

-Lo vi con mis propios ojos, señor, yo también quedé afectado.

-Está bien, William, nos has dado años de excelente servicio y confío plenamente en usted, espero que ésta vez no sea distinto.-pone una mano en mi hombro y lo aprieta, ¿por qué todo el mundo cree que vamos a morir hoy?-Entra ahí y haz tu trabajo, te estaremos esperando.

Asiento y se vuelve para preparar a los Agentes mientras yo camino desde nuestro asentamiento hasta el almacén, un par de minutos solamente.

Se me ponen los pelos de punta cuando me pongo ante la puerta, pensando en que Emma está ahí, que es la persona que más he querido nunca y que debo hacer bien mi trabajo para no quedarme sin ella. Con esa motivación y una mano en el cinturón de las armas, entro en el almacén con el pulso a mil.

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Buenas!!

Sé que me ha quedado muy corto, pero he aprovechado que por fin he reescrito el capítulo 16 y ha sido el momento perfecto para subir éste que es mas corto, probablemente volveré a subir éste fin de semana ya que estoy con los exámenes y no me dará tiempo a escribir, aunque la novela ya está prácticamente terminada.

Nos vemooos!