Nadie dijo que fuera fácil.

Capitulo 17

Kiara.

No sabía qué hora era pero por los cristales del coche ya entraba la luz del sol, ya estábamos en camino otra vez.

- Buenos días – dije, pero solo conseguí una mirada seria de Dominic por el retrovisor - ¿Cuánto tiempo llevas conduciendo?

- Unas dos horas

No conseguí mas respuesta de su parte, así que empecé a cambiarme de ropa, el calor ya se empezaba a notar así que me cambie a unos pantalones cortos que me había dejado Hanna y una camiseta básica con mis converse. Hoy no se había levantado con buen pie eso se podía notar en el mismo ambiente, así que me moví al asiento del copiloto, conseguí una mirada rápida pero la volvió a cambiar rápidamente al frente.

- ¿Qué tal? – me atreví a preguntar porque el silencio que había en el coche era insufrible, pero solo subió y bajo los hombros - ¿No me piensas hablar después de lo de anoche?

- Mira Kiara.... – empezó a decir

- ¿Otro error no? – le en un susurro

- Si, así que olvidemos lo de anoche ¿Vale? – Dijo enfadado – estaba cabreado con Leslie y eso fue todo.

- ¿Y porque me besas y sales corriendo? ¿Y a ella siempre vuelves? – dije frustrada

- Porque ella tiene cosas que tu no las vas a tener nunca

- ¿Más tetas? ¿Más culo? Pues eso no parecía importarte mucho Dominic

- Exactamente, yo necesito un buen culo y unas buenas tetas y tú no las tienes. y ya te he dicho porque no me importó, necesitaba a alguien con quien desahogarme.

No acabaría de ser tonta nunca, y pensar que había una mínima posibilidad de que le gustara, soy patética, está claro que nunca podre estar a su altura, ni a la altura de una que a él le pueda llegar a gustar, él simplemente me utilizó y tonta de mi si hubiéramos seguido a más en la noche.

Las lagrimas picaban en mis ojos y una ya resbalaba por mi mejilla, así que recline un poco el asiento le di la espalda a Dominic y seguiría intentando dormir hasta que llegáramos.

Dominic.

Sabía que estaba llorando y no era para menos me sentía como la puta mierda, ella no se merecía eso, pero ahora por lo menos la podre mantener lejos de mi.

El viaje se me estaba haciendo eterno, Kiara parecía que estaba dormida, cuando íbamos acercándonos a la puerta ella se empezó a mover en el asiento.

- ¿ya hemos llegado? – dijo con voz ronca de no haber hablado durante horas.

- Si – quería mirarla a la cara pero no me podría contener a abrazarla y traerla conmigo a mi regazo y suplicarla que me perdonara por ser tan malditamente gilipollas con ella.

Aparque al lado de la moto de Liam y Hanna salió instantáneamente a la puerta del coche de Kiara.

- Pensábamos que os habíais perdido – sonrió - pero su sonrisa se borro cuando vio la cara de Kiara, sus ojos estaban rojos y un poco hinchados. - ¿Qué te ha pasado? – dijo Hanna dirigiéndose a ella pero mirándome a mí.

- Es solo un poco de alergia y de dormir mal, no te preocupes Hanna con un poco de agua se me pasara – sonrió, aun que más bien se quedo en una mueca.

- Ya hablaremos – me dijo mientras se llevaba a Kiara dentro.

- No hay nada que hablar Hanna déjalo ya – dije lo mas cortante que pude.