Capitulo 4
-Hola linda, ¿como te llamas?
-Me llamo Lía, y tu?
-Diland, quieres bailar?
Me desperté sudando, y es que no entendía, ¿Quien era Diland? ¿Que tenia que ver Lía? Y mejor aún ¿Que tenia que ver yo con ellos? Iba a parar a loca en cualquier momento.
Me levanté y fui a bañarme, hice lo mismo de siempre, bajé y comí cereal antes de irme al instituto, ese día Brenda fue a buscarme para irnos juntas.
Llegamos y a quien primero veo es a Tomás, estaba muy guapo, me miro, y corrí a saludarlo para mi parecía una eternidad el día que falto al instituto.
-Hola Tomás, me alegra verte, ¿como sigues?
-Hola enana, estoy mejor, solo es una gripa que no me dejaba pararme de la cama.
-Me hiciste falta.
- Ayy, también me hiciste falta enana. -Puso los ojos de cachorrito tierno característicos de él y yo solo solté una carcajada.
La mañana trascurrió igual que siempre, y yo todavía no entendía que había pasado con Derek, le había huido un par de veces, pero al lado de Tomás me sentía segura, y además no tenía que temerle a Derek el no tenía porque hacerme daño o algo parecido.
Salí del instituto con Tomás a mi lado y nos fuimos en el trasporte público hacía nuestras casas, íbamos camino A la estación de trasporte cuando Derek freno en frente de nosotros, me asusté porque casi atropella a Tomás.
-Evi ¿Puedes venir conmigo? Necesito hablar contigo. -Tenia una sonrisa forzada, me daba un poco de miedo la mirada que tenia.
-No Derek, no puedo, tengo cosas que hacer.
-Por favor Evangeline, necesito hablarte, solo sera un momento lo prometo.
Tomás nos miraba confundido, ya me había dicho que le daba mala espina Derek, él es de los que le gusta estudiar el comportamiento de las personas y eso, yo sentia la garganta seca, no podía hablar.
-Ella esta ocupada, saldrá conmigo esta tarde, no irá contigo. -La voz de Tomás resonó en mi cabeza y me sacó de mis pensamientos, lo dijo mostrando toda la irritación que tenia, y la cara de Derek cambió de sonrisa forzada a total rabia, subió el vidrio y arrancó con toda la velocidad que daba el auto.
-Evi ¿Estas bien?, ¿Que paso con él? ¿Por qué te busca?
-Si estoy bien Tomy y no se porque me busca.
Continuamos caminando y Tomás no me habló más en el camino, y yo tampoco, él iba pensativo y yo también, se despidió de mi al llegar a su casa y después de un rato llegue a la mía.
Entré y mi madre estaba cocinando mi padre aún no había llegado era un hombre muy ocupado y mi hermano estaba viendo televisión en el sofá, los salude y subí a mi habitación, debía comer, reposar y arreglarme para ir al psicólogo ya se había convertido en mi rutina.
Comí, me arregle y fui con mi madre al psicólogo, mi psicólogo tenia unos 28, era guapo, sus ojos eran marrón claro, blanco, cabello liso, hacía sentir a sus pacientes bien o al menos a mi, sentía que podía confiar en él, pero no lograba recordar nada y eso me frustraba.
-Hola Evangeline, ¿Cómo has estado?
-Hola Steven, ¿bien y tu?
-Bien, ¿No te ha pasado nada? Algún sueño, recuerdo o algo?
-Bueno... Anoche tuve un sueño pero no logré entenderlo, era algo así como que un tal Diland se le presentaba a mi amiga pero yo no entendí que tenía que ver yo ahí.
El anotó algo en su block de notas luego hicimos unas terapias que supuestamente me harían recordar, siempre hacíamos las mismas terapias, acabó la hora y me fui a mi casa con mi madre.
Llegamos y en el piso cerca de la puerta había un sobre amarillo, mi madre me preguntó que era pero yo solo me encogi de hombros y lo levanté.

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Salvame de ti (#1)
Mystère / ThrillerCuando las sombras y demonios de nuestro pasado se apoderan de nuestras mentes ocurren malos sucesos, es ahí justo en ese momento cuando la locura se apodera de nosotros. Y así es como Derek y Evangeline se conocen. Ella a pesar de no saber lo que l...