Salvame de ti (#1)

Capitulo 13

Historia de Derek

Derek

Soledad; eso era lo que siempre me acompañaba, desde muy pequeño, mis padres me trataban como si hubiese sido mejor que no naciera, en algún momento escuché que mamá le decía a papá que ni loca tendría otro hijo parecido a mi, si, así de mal se refería a mí.

Fui creciendo y los desplantes de mi madre iban en aumento, mi padre trabajaba demasiado y casi nunca estaba en casa. A cada reunión que nos invitaban yo no asistía y no porque no quisiera, si no porque mi madre decía que la avergonzaba, y me dejaba con la señora de servicio siempre, ella no era mala, pero solo se limitaba a hacer lo que mis padres decían por lo cual nunca le tomé cariño.

A veces pasaba horas y horas mirándome en el espejo y dandome asco yo mismo, me culpaba a mi, por nacer, y hacer que mi madre me despreciara tanto, no tenia amigos ni amigas, casi no salia de mi habitación, nadie notaba mi existencia, a exepcion de Mac mi profesor, el venia a darme clases en mi casa.

Decidí un día suicidarme, pero me salvaron justo a tiempo, y fue entonces cuando conocí a Steven, mi psicólogo, y mi gran amigo, al principio no quería ir, ya para ese entonces todas las personas me daban asco y accedí solo porque al fin podría salir de mi casa y eso era un avance, el se convirtió en mi amigo, el único, y me fue de gran ayuda para sentirme mejor conmigo mismo. Convenció a mis padres para que me inscribieran en un instituto, y así fue, al principio algunas personas trataron de acercarse y hablarme, pero yo no estaba acostumbrado a socializar con nadie, simplemente las personas a excepción de Steven, me daban asco.

Siempre andaba solo por los pasillos y en todos los trabajos, pero un día llegó una chica nueva, y era lo mas bello que había visto en mi vida, sus ojos verdes, su piel blanca que desde la distancia se veía que era suave, su cabello castaño en ondas, era fascinante, y caí rendido a sus pies solo con mirarla.

Pasaron un par de semanas y ella siempre estaba sola, no podía permitir que un ser tan hermoso vagara solo por ahí, así que decidí hablarle y fue lo mejor que pude hacer en mi vida.

Comenzamos siendo amigos, nos las pasábamos juntos, hacíamos los trabajos juntos, hasta mi madre por primera vez en mi vida, me apoyó en algo, y ese algo era mi Melanie, ella llegó a cambiar mi vida para bien y no la dejaría ir nunca. Le conté sobre todo esto a Steven, quien se mostró más que emocionado, él fue el que me hizo darme cuenta que estaba enamorado de ella, y me animo a decirle lo que sentía, y como era de esperarse se lo dije, con todo el miedo arropando mi corazón, pero todo eso se esfumó al ella decirme que correspondía a mis sentimientos y juro que era el hombre más feliz del mundo, todo mi pasado estaba sepultado, ya no necesitaba terapias, ni mas libros de auto-ayuda, ya era feliz y solo iba con Steven para contarle mis cosas ya que era mi mejor amigo, le presente mi novia a mi madre y por un momento se sintió orgullosa de mi al igual que mi padre, todo iba perfectamente bien, hasta que Melanie comenzó a cambiar y eso no me gustaba.

No me gustaba compartir lo que era mío, si, así de egoísta era, ella consiguió amigas y yo obviamente se lo prohibí, conmigo era suficiente, no necesitaba amigas, un día estaba hablando con un chico y sentí como me quemaba vivo, fui hacia donde estaban ellos y casi mato a el chico a golpes, ¿que se creía ese infeliz para estar hablando con mi chica? Y así pasaron muchas cosas mas que yo no podía aceptar.

Un día lluvioso y deprimente, Melanie pidio hablar conmigo, pensé que era para algo normal, pero cuando dijo que quería terminar con nuestra relación, sentí como el mundo caía sobre mis hombros, sentí como si miles de vampiros salieran, y acabaran con toda la sangre que quedaba, le rogué, le suplique que no me dejara solo, hasta me arrodillé pero nada sirvió, ella me dejó, ahí, solo, deprimido, al borde de morirme, mi madre volvió a ser la misma detestable mujer de siempre, nadie en el instituto me hablaba, ni yo a ellos, vi a Melanie con un chico, muy feliz sin mi, y eso era nocivo para mi salud, Steven comenzó a hacerme terapias pero no eran las mismas que antes estas eran diferentes.

Un día me levante terriblemente mal, y Steven me dijo que tendría que internarme porque mi estado era crítico, salí desbastado, de ese lugar, odiaba a todos, me odiaba a mi, odiaba a mi madre, odiaba el miserable día en que nací, a Melanie, a todos los odiaba , a absolutamente todos, y fue entonces cuando los vi, Melanie y el chico, abrazados, besándose.

Comencé a hacer un plan que para mi sería de mucho bien, me quitaría al nuevo novio de Melanie del camino, y ella estoy seguro que volvería conmigo.

Y entonces los seguí y lo maté, lo amarre en una tabla de madera, crucificado, amarré sus párpados, queme su cara poco a poco, Melanie estaba enfrente amarrada y amordazada viendo todo, entonces le enterré un cuchillo en su pecho y corte desde ahí hasta la parte baja del abdomen, saque algunos órganos, y susurré un: "Esto es por meterte con mi chica" y le clavé el cuchillo en el corazón.

Con respecto a Melanie que se encontraba tirada en el piso, llorando a mares, le quite la mordaza para decirle que volviera conmigo que ya había quitado a ese sucio hombre de nuestro camino, pero ni siquiera me miraba, solo miraba el vacío, la llame varias veces y no hubo respuestas, hasta que me obstiné no me gustaba que me ignoraran y queme su cara poco a poco y la desfigure un poco ella gritaba, pero me importaba en lo mas mínimo.

Luego de haber hecho mi obra de arte, un tiempo después unos policías y unos hombres vestidos de blanco llegaron a mi casa, y uno de los dos me inyectaron algo y lo último que vi fue a Steven con lágrimas en los ojos.