Alaska estaba bastante aburrida y su madre comenzaba a agarrar ropas que no eran del gusto de su hija.
"Mamá, esto es aburrido. ¿Podemos marcharnos ya?" Insiste la muchacha con una expresión de disgusto en el rostro.
"Pero hay muchas ropas y estilos diferentes" Responde con una gran sonrisa.
"Esto no es de mi agrado, lo siento mamá" Bufó. Su madre asintió levemente y ambas abandonaron la tienda.
Mientras caminaban, Alaska mantenía su mirada baja hasta que chocó con alguien que era muy conocido. Era Calum.
"Eh, ¿Calum...?"