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Avery's POV:

Es tan temprano por la mañana cuando me pongo de pie.

¡Es increíble lo rápido que se ha ido el semestre!

Me meto en la ducha con demasiado buen humor.

Mentiría si digo que no estoy temblando como cascabel de la emoción.

Hoy, finalmente, uno mi vida a la de Zayn.

Ni siquiera había podido dormir bien a causa de mis nervios, además estuve pensando en un millón de escenarios de nosotros. Me había dejado fantasear toda la noche con nuestra boda, había ido aún más allá y cada vez me maravillaba más la idea de estar a su lado que no pude dormir, no quería dejar de soñar despierta.

Sabía que esta era la decisión más acertada que había tomado nunca, me sentía satisfecha y completamente feliz. Ya habíamos firmado el

Tomo una toalla para envolver mi cuerpo en ella y luego ir a cambiarme para poder maquillarme después.

El tiempo se me estaba yendo realmente lento o estaba haciendo todo demasiado rápido. Sólo quería que fueran las doce para poder verlo.

[...]

Mi madre está peinando mi cabello con toda la paciencia del mundo.

Está feliz de poder ver a su hija casarse y yo sé que él es el hombre idóneo.

Mi cabello está completamente recogido y mi maquillaje terminado.

A pesar de que siempre llevo mi cabello suelto, me gusta la manera en que se ve recogido.

Me pongo de pie para ir por mi vestido blanco.

Que me regaló mi madre hace un mes, ya que ella es muy tradicional, nada que ver con nosotros o al menos conmigo. Nuestra boda sería por el rito musulmán porque para Zayn es importante seguir con la tradición, pero no tendré que usar el caftan y mi piel no será decorada por henna porque me causa cierta alergia y me es prácticamente imposible tolerarla.

Había estado investigando todo lo referente a las bodas musulmanas. Los novios no podían cotejar ni convivir mucho antes de la boda, cosa que entre Zayn y yo no podría ser, por ciertas y obvias razones. También no se lleva a cabo en un solo día, sin embargo, la madre de Zayn y la mía habían hablado con el Imán para poder llevar acabo la boda en un proceso más rápido, sin la ceremonia Imam Zanim, ni Manjha, ni mucho menos la Mehndi por mi alergia a la henna. Lo que sí se llevaría a cabo sería la ceremonia Nikaah, pero no sería en casa de ninguno de nosotros, sino en una Mezquita, que es en The Baitul Futuh Mosque, por un imán bajo las leyes islámicas.

Trisha entra en mi habitación, me mira y sonríe.

Yo sonrío tímida. Aún me intimidaba un poco su presencia a pesar de que todas las cosas que Zayn hubo dicho no eran ciertas.

Zayn se asoma por el umbral de la puerta.

- ¡Estás preciosa, Av! - elogia, mientras se acerca corriendo, tomando mi rostro entre sus manos y me besa con fuerza, le correspondo y acaricio sus brazos mientras vuelve a entrelazar nuestros labios.

Mientras mi madre y la suya chillan que es de mala suerte ver a la novia antes de la boda y mil y un cosas más hasta que nos separan.

- ¡Te amo, nena! - grita, cuando su madre está a punto de cerrarle la puerta en la cara, río y le mando un beso.

- ¡Y yo a ti! - respondo energica.

{...}

Zayn's POV:

Estaba realmente nervioso frente al altar, mis dedos tamborileaban en mi pierna.

¿Y si no venía? ¿Y si le pasa algo durante el camino?

Tenía esa sensación de angustia plantada en el centro de mi estómago por no saber dónde está justo ahora. Necesitaba estar viendo cada uno de sus movimientos para sentirme seguro.

La espera se estaba volviendo infinita y mis nervios aumentaban con cada segundo que pasaba. Y si me permiten decir que siento como que cada segundo que pasa son diez años.

Estoy perdiendo mi temperamento, quiero salir a buscarla.

Hasta que la veo en la puerta en su hermoso vestido blanco. Y una sonrisa colgó de sus labios cuando me vio a mí, como si ella también hubiera estado nerviosa porque yo no estuviera aquí.

Cuando llegó a mi lado del brazo de Amirov, prácticamente se soltó de su agarre y tomó mi mano.

Sonreí y acaricié su mejilla, sintiéndome más tranquilo.

- Te ves hermosa, Avery - sonrío, ladeando mi cabeza para mirarle bien.

- Tú también estás hermoso, Zayn - responde con sorna.

Río y rozo nuestras narices.

El imán llega para llevar acabo la ceremonia, leernos las leyes islámicas del matrimonio y un montón de cosas más a las que no puse atención porque la estaba mirando sólo a ella. Sus celestes tan brillantes, sus labios con solo brillo labial y su maquillaje prácticamente al margen. La manera en que su cabello estaba peinado me dejaba ver completamente su rostro, sus orejas, adornadas por un par de perlas pequeñas.

Salí de mi ensimismamiento cuando escuché a Avery repetir las palabras que le decía el imán:

-"Me caso contigo por la dote acordada"-

Ella y yo no habíamos acordado ninguna dote, sino un anillo.

-"Acepto el matrimonio"-

Respondí; el imán me tendió la pluma para firmar el acta, pero dejé que mi mujer lo hiciera y después hacerlo yo.

Y oficialmente estábamos casados.



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