Dangerous

044

Avery's POV:

Cuando terminé de darme una ducha, me vestí y me puse los zapatos.

Entré en la habitación donde estuve postrada por semanas en una camilla.

Zayn estaba ahí.

¿Qué podía decirle? Ni siquiera sabía hasta donde recordaba.

- ¿Cómo estás? - pregunto, comenzando a guardar mis cosas en una mochila.

- Me siento mejor, gracias - responde extrañado, examinando cada movimiento que hago.

- Eso es bueno - intento sonreír -. Ya verás que dentro de poco vas a poder salir de aquí -

Él suspira y asiente.

Sus labios se separan para hablar, espero con ansias sus palabras, pero vuelve a cerrarla.

- ¡Hey! ¡Chicos! - Niall entra en la habitación -. ¡Qué felices lucen! - ironiza al ver nuestros rostros.

Le doy una leve sonrisa y me apresuro a seguir guardando el resto de mis pertenencias en la mochila.

Amirov estaba fuera.

- Eh, Zayn, Amirov está afuera, dice que va a llevar a Av a casa. ¿Estás de acuerdo en que él la lleve? -

Él frunce su ceño y me mira.

Siento mi estómago apretarse.

- Sí, que se vaya - responde sin darle importancia -. Niall - lo llama -, ¿dónde está Nancy? - inquiere, mirando hacia su alrededor.

Una piedra es lo que siento caer en mi sistema.

- Zayn, ¿no recuerdas que ella...

Ed entra en la habitación, examinando un par de papeles.

- Bien, Av - me mira por unos segundos -. Puedes ir a casa ya, descansa y no olvides que cualquier dolor que sientas de inmediato debes venir -

Asiento.

Tomo mi bolso y me apresuro a salir de la habitación, sintiéndome nada a lado de Nancy. A ella la recordaba y a mí no.

Sabía que era realmente difícil que él volviera a enamorarse de mí, porque justo ahora él está enamorado de Nancy, de alguien que ya murió.

Cerré la puerta detrás de mí, ahí estaba Amirov.

- ¡Av! - me abraza y me quita la mochila de los hombros, junto con mi bolso -. ¿Cómo estás? ¿Puedes andar sola? - me pregunta.

Y sin más, sólo lo abrazo porque pude haber muerto y no verlo nunca más y porque necesitaba ese abrazo ahora mismo, porque nadie sabía lo que era no ser recordado por la persona más importante para ti.

Mis ojos se aguaron y me aferré más a su abrazo. Él acariciaba mi espalda.

- Te quiero, hermana - besa mi frente.

Yo sonrío y me seco las lágrimas.

- También te quiero, Am - vuelvo a abrazarlo.

[...]

Cuando llego a casa, lo primero que hago es ir al baño con urgencia. Hago mis necesidades y me ducho de nuevo. Me pongo ropa cómoda y voy a mi cama a dormir. Tal vez esto sólo fuera una pesadilla.

[...]

Abrí mis ojos. Las cortinas estaban cerradas tal y como cuando abandonamos la casa en nuestro intento de huir.