Dangerous

025

Zayn sujeta su mano firmemente, mientras caminan tranquilamente por el parque St. James's Park, a lo largo del lago, había gente ahí.

Iban solos, sólo ellos dos, sin Harry, sin Niall.

Avery observaba a los patos que hacían un "cuack" de vez en cuando.

Los camiones de doble piso pasaban de vez en cuando, seguidos a carros y taxis británicos.

− ¡Me gusta tanto Londres! − expresa Avery, con una sonrisa, mientras observa la grandeza del Buckingham Palace, que quedaba frente a ellos, sólo bastaba cruzar la calle.

Zayn sonríe.

− Sí, es una ciudad bonita − acota, mientras observa a su novia, ella le devuelve la mirada y le sonríe.

Cruzaron la calle para quedar fuera del palacio y caminar por un costado, siguiendo por el Green Park.

Era uno de esos días poco comunes en Londres, había sol y las personas pasaban con sus perros, paseándolos; familias que salían a, simplemente, pasar su día juntos.

− Zayn − habla ella, decidida a preguntar lo que venía rondando en su cabeza las últimas seis horas. Él la mira para que prosiga −. ¿Cómo fue que Amirov supo de ti? − pregunta.

Zayn frunce sus labios y saca un cigarrillo de dentro de su chaqueta, para luego sacar su encendedor y prenderlo.

− ¿Por qué quieres saberlo? − inquirió, intentando no sonar tan brusco.

− Porque es ilógico que te haya buscado a ti primero − responde.

− Cierto − acota −. Si yo fuera él primero te habría buscado a ti −

− Esto es muy confuso, además, ¿por qué papá simplemente no lo dejó con nosotros en Canadá? ¿Por qué mamá nunca me dijo nada? − pensó en voz alta.

Zayn simplemente se encogió de hombros.

− Simplemente yo no lo sé, Av, podría preguntárselo, pero es obvio que yo no le agrado −

Avery lo observa.

− Pero él tampoco te agrada a ti −

Zayn vuelve a encogerse de hombros.

− A mí no me agradaría la persona que mandó asesinar a mi padre − simplemente dijo.

Avery se tensó. Esto ya no iba bien, era demasiado enfermo para ser verdad. Ella estaba con el asesino de su abuelo y el responsable del asesinato de su abuelo. Pero no podía simplemente dar un paso atrás porque de verdad lo amaba y en ese punto exacto era donde todo se volvía ilógico. No era posible que estuviera enamorada de él.

Así que a su comentario, prefirió guardar silencio.