– ¿Qué rayos haces aquí? – pregunto el entrenador Sarutobi, deteniéndose enfrene a una banda apoyada en una pared de su gimnasio. Apoyando sus manos en su bastón, viendo a quien estaba sentada en aquella banca. – ¿Quién eres?
– Mi nombre es Sakura Haruno, Sarutobi san. Yo soy...
– Es la novia de Naru chan. – hablo Jiraiya interrumpiendo a Sakura. Saliendo de una puerta la cual daba con las escaleras del segundo piso, pasando por en medio de Sakura como del entrenador. – Saldré a correr mi ruta. – murmuro, para salir por la puerta trotando.
– ¿Novia...?
– No somos novios, Sarutobi san. – susurro Sakura inflando una de sus mejillas, poniendo unos lineales ojos los cuales casi parecían un signo de menos. – Él y yo solo somos amigos, y compañeros de escuela.
– ¿Estás interesada en el boxeo? Porque yo no entreno mujeres, aun así puedo darte el número de Chiyo, una buena...
– No señor. Solo vengo a ver a Naruto y a los chicos entrenar. – hablo Sakura interrumpiendo al entrenador, apuntando con su dedo al ring delante de ellos donde estaba Naruto intercambiando golpes con Kakashi. – No sabría decir exactamente si me gusta el box. No entiendo el punto de disfrutar el recibir devastadores golpes o de destrozar a puñetazos a otro. Sin embargo, me gusta ver a Naruto entrenar. No sabría decir por qué. ¿Tiene algún problema con eso Sarutobi...?
– No hay problema. – respondió el entrenador interrumpiendo a Sakura. – Claro, mientras no estorbes en el entrenamiento de mis boxeadores, no veo problemas en que vengas a ver a Narutoentrenar. Y te lo advierto... aléjate lo mas que puedas de Jiraiya.
– ¿Eh...?
– ¡Te tengo! – exclamo fuertemente Naruto, enterrando con fuerza su puño en el costado del cuerpo del hombre.
– Coño... – gruño Kakashi hacia adentro, recibiendo todo el impacto del letal puño contra su cuerpo. – Hagamos una pequeña pausa.
– Qué vergüenza. ¿Cómo puedes dejar que un boxeador de una categoría menor a la tuya te deje así de mal, Kakashi? – hablo el entrenador Sarutobi golpeando el suelo con su bastón.
– Solo nos separan unos pocos kilogramos... y Naruto tiene una pegada muy fuerte. – respondióKakashi quitándose un casco protector rojo. – Creo que tendré serios problemas si subes de categoría.
– Miren lo que nos acaba de llegar. – escucharon todos, viendo a Iruka entrar por la puerta sosteniendo un paquete cuadrado envuelto en un papel marrón. – La licencia de boxeador profesional de la federación japonesa de boxeo.
– ¿Es la mi licencia? – pregunto Naruto bajando del ring de un salto. Corriendo inmediatamente hacia el castaño con una imborrable sonrisa en su rostro. – ¡Por fin llego! – exclamo abriendo aquella caja, encontrándose con una tarjeta similar a una identificación. – Es... ¡genial! – exclamo, sujetando la tarjeta en sus manos con una enorme sonrisa de oreja a oreja, casi como un niño con un juguete nuevo.
– Felicidades. – dijo Sakura, así como Iruka y Kakashi viendo al sonriente rubio.* * *– Bien Naruto, iniciaremos con un entrenamiento de máximo nivel. – hablo el entrenador Sarutobi viendo al rubio de pie frente a él. – Si ganas el premio del novato del año, ganaras publicidad y renombre. Si la gente te acepta y das buenas luchas, tu camino hacia el cinturón de campeón de Japón de peso pluma será cada vez más corto. Para eso deberás derrotar a boxeadores igual o más fuertes que tu.
– Sasuke estará en ese torneo, ¿verdad? – pregunto Sakura levantando su mano. El entrenador Sarutobi respondió asintiendo con su cabeza.
– Deberás luchar contra cuatro boxeadores en total si quieres llegar a la cima del torneo del novato del año del Este de Japón, y ganando podrás enfrentar al novato del año del Oeste de Japón en la llamada lucha "El Rey Novato". – hablo ahora Iruka, de pie a un lado del entrenador Sarutobi.
– Al mismo tiempo, Jiraiya y Kakashi iniciaran su escala en el ranking nacional para llegar al cinturón. – hablo el entrenador Sarutobi viendo a los tres boxeadores.
– ¿Cuándo es mi lucha de debut como profesional? – pregunto Naruto cruzándose de brazos.
– Exactamente en 26 días. – Respondió el entrenador Sarutobi. – Así que comenzaremos con el entrenamiento ahora mismo. ¡A correr! – grito repentinamente, asustando a todos los presentes.
– ¡Sí! – respondió Naruto, para inmediatamente ir hacia la puerta y salir corriendo desde esta.
– Jiraiya, necesito que entrenes para tu pérdida de peso. Kakashi, necesito que tu juego de piernas mejore. – hablo el entrenador llevando su vista hacia los dos boxeadores quienes simplemente asintieron con su cabeza. – ¿Esperan una tarjeta de invitación? ¡Muévanse ya! – grito nuevamente el hombre, generando la misma reacción de Naruto en estos dos. – Y por último, Sakura... – hablo llevando su vista hacia la callada pelirrosa. – Lo que te diré quizás sea un poco egoísta, pero eres de confianza de Naruto y él te necesita.
– ¿Me necesita? – repitió una extraña Sakura apuntándose a sí misma con su dedo.
– Naruto tiene un enorme potencial. Nació con "campeón" como marca de nacimiento, sin embargo, la única condición que tiene Naruto para entrenar en este gimnasio es mantener unas buenas calificaciones y un boxeador no se destaca precisamente por tener un buen cerebro... su cerebro se estremecerá por la acumulación de golpes, y apenas tiene 17 años y esta cursado segundo año quedándole aun uno. – hablo el entrenador viendo serio a la joven pelirrosa. – Si bien Naruto no tiene malas calificaciones, es posible que por reposo deba descansar unos cuantos días y es por eso que necesito y te pido como entrenar de Naruto, que lo ayudes en la escuela si puedes.
– Puede contar conmigo. – respondió Sakura formando una gentil sonrisa. Estrechando su mano con la del entrenador.
* * *– Ese rubio es muy raro. – murmuro un castaño chico de cabello corto y desordenado, de negros ojos, teniendo en cada mejilla un colmillo rojo dibujado. Vistiendo uniforme escolar.
– Encontrándose este sentado alrededor de una mesa en la cafetería de la escuela, acompañado del mismo pelinegro y castaño regordete que hace un tiempo vieron al rubio; mientras todos veían al mismo rubio sentado bebiendo una botella de agua. El pelinegro se llamaba Shikamaru, el comilón castaño se llamaba Chougi, y el castaño de melena desordenada se llamaba Kiba. Además de estos, se encontraba un cuarto pelinegro el cual tenía unas gafas de sol, de nombre Shino.
– ¿Alguien sabe cómo se llama? – pregunto Shikamaru.
– Naruto Uzumaki. – escucharon los chicos, levantando la vista para ver a un grupo de tres chicas quienes se sentaron en la misma mesa.
– Estoy seguro de que algo esconde. Ya es raro de por sí que no entrara a un club escolar, respondiendo que está ocupado. ¿Pero en qué rayos usa ese tiempo? – hablo el castaño de nombre Kiba.
– Nosotros lo sabemos. – hablo Ino, tomando con una cuchara un poco de arroz. – Es boxeador.
– ¿Boxeador? – repitieron todos los chicos en la mesa, llevando inmediatamente su vista hacia el tranquilo y solitario rubio el cual le dio un mordisco a una banana.
– Lo dudo. – murmuro Kiba, formado aun sonrisa en su rostro. – Yo podría patearle el trasero donde sea y cuando sea.
– ¿Tu primo no es boxeador, Hinata? – pregunto Shikamaru viendo a la callada peliazul.
– Si. – respondió tímidamente.
– Naruto si es boxeador... de hecho, nosotros lo vimos con nuestros propios ojos hacer el examen de profesional el cual aprobó al parecer. – hablo ahora Tenten, bebiendo leche achocolatada de una cajita en su mano a través de una pajilla.
– Naruto. ¿Todo bien? – pregunto Sakura, sentándose a un lado del rubio.
– Bueno, se podría decir que si... estoy un poco cansado. El entrenamiento es más duro que cualquiera que haya tenido hasta el momento. – respondió Naruto soltando un cansado suspiro.
– Ese... ¿boxeador? – murmuro Kiba.
* * *– ¡Corre, corre, corre, corre! ¡No quiero que pares, muchacho! ¡¿Quieres llegar al cinturón de campeón?! – grito el entrenador Sarutobi, el cual se encontraba de pie frente al rubio quien hacia abdominales.
– ¡Sí! – respondió Naruto con un grito.
– ¡Entonces no pares! ¡Serás el campeón de peso pluma!
– Están muy motivados. – murmuro Sakura, sentada en la banca mientras enfrente a ella se encontraba Kakashi lanzando golpes al aire.
– Naruto tiene experiencia con algunas luchas como amateur, pero aun así, nunca ha tenido una lucha digámoslo completamente profesional. Este será su debut, su primera pelea como profesional en la vida. – hablo Kakashi, haciendo una pequeña pausa para tomar aire. – Todo boxeador quiere tener una victoria como debut.
* * *– La gran lucha de debut de parte de Naruto como profesional. Su boxeador al contrario no lo es. Tiene 3 peleas, dos victorias y una derrota, un nocaut y una por puntaje, así como una derrota por nocaut. – hablo Kakashi cruzado de brazos. Sentado en un asiento en unas gradas junto a Jiraiya y Sakura.
– Naruto en cambio es un papel en blanco. – murmuro Jiraiya sentado en su asiento igualmente cruzado de brazos. – Además, tiene toda la presión de una primera lucha en un estadio lleno como este.
– Espero no esté nervioso. – comento Sakura.
* * *– Mocoso... ¿Cómo te sientes? – pregunto el entrenador Sarutobi, de pie en un oscuro pasillo viendo al rubio a su lado. – ¿Nervioso?
– Mucho. – susurro Naruto. Escondiendo sus ojos así como su rostro, teniendo una toalla blanca en su cabeza.
– La primera lucha de la noche es por el torneo del novato del año del Este de Japón, donde lucharan dos jóvenes novatos profesionales. El primero es un debutante, del gimnasio Sarutobi, con 56,8 kg y 1,78 de altura... ¡Naruto Uzumaki! – presento un narrador de la pelea, sentado en una mesa frente al ring con unos cascos unido a un micrófono.
Saliendo de una puerta el mencionado y presentado boxeador, vistiendo unos holgados shorts negros teniendo en su cintura bajo su ombligo un cuadro blanco con NARUTO escrito en letras negras, así como detalles naranjos en los costados de las piernas con formas de rasguños naranjos así; así como las mismas botas negras con detalles naranjos que usaba, y finalmente unos rojos guantes de boxeo.
– Ahí está Naruto. – murmuro Sakura, viendo al rubio subir al ring con las cuerdas abiertas por Iruka así como el entrenador Sarutobi. – Bueno, positivamente no se ve muy nervioso.
– Lo está. – susurro Jiraiya.
– Miren a su rival... ese tipo se ve muy intimidante. – murmuro Sakura, viendo al segundo boxeador en el ring. Este era un tipo enorme, con la cabeza y las cejas afeitadas, teniendo un cuerpo hinchado en musculatura.
– Bueno, sí, pero el boxeo no tiene nada que ver con la apariencia física. ¿Cuándo conociste aNaruto pensaste que era boxeador? – hablo Kakashi formando una pequeña sonrisa en su rostro.
– Quiero una lucha limpia, sin golpes bajos ni golpes en la nuca. El encuentro durara cuatro rounds y cada round durara exactamente tres minutos. – hablo el réferi en mitad del ring, con los dos luchadores frente a frente. – ¡Boxeen! – exclamo.
– Inicio la primera lucha de Naruto como profesional. – susurro Sakura, escuchando la campana sonar dando inicio a la lucha.
– Te enseñare que es lo que significa ser un boxeador profesional, mocoso. – pensó el hombre en posición, avanzando hacia Naruto el cual estaba inmóvil. Lanzando unos rápidos golpes con la izquierda, golpes los cuales conectaban contra los brazos de Naruto quien cubría su cuerpo y parte de sus rostros. – Este mocoso no sabe atacar. Terminare pronto con este juego de niños. – pensó, formando una pequeña sonrisa en su rostro. Rotando su cuerpo, apuntando con su puño derecho hacia Naruto.
– Ahora. – susurro Naruto, abalanzándose con un salto hacia adelante. Conectando violentamente su puño derecho contra el rostro del sujeto.
– ¡Qué derechazo directo más fulminante de parte de Uzumaki! – exclamo fuertemente el comentarista, viendo la cabeza del sujeto salir expulsado hacia atrás con fuerza.