Capítulo 31

460K 28K 8.4K
                                    

Esta historia está publicada en papel por el equipo Penguin Random House grupo editorial. Puedes encontrarlo en diferentes países (explicados en un capítulo especial) y también vía amazon. 

*

– Tranquilo campeón –Habló Mark y luego tosió. Volví a ponerme la capucha y le di la espalda, cerré mis ojos con fuerza evitando el miedo. –Explícame que sucede.

– Necesito saber de quién es este número –Escuche decir a Caín. Volteé enseguida a ver la expresión del viejo. Mark anotó el número en una libreta y luego nos hizo sentarnos. Llamó un par de veces hasta que rápidamente le contestaron, nos hizo callar y puso el altavoz.

¿Hola?

– Qué tal, habla Mark Crick –Él no tenía idea con quien estaba hablando, pero según Caín debía hacerlos entrar en confianza.

¿Qué pasa Mark? Habla Bruce Davent.

La mirada de Caín se fue al escritorio.

– Tenía unas llamadas perdidas de este número Davent ¿Me necesitabas para algo?

No, nos debimos haber equivocado. Lo lamento Mark, estos son unos idiotas.

¿Quienes?

Josh y unos idiotas más. Parece que las peleas clandestinas los dejan aturdidos.

– Al parecer si –Habló Mark en un tono serio. Caín miraba hacia todos lados intentando recordar y Mark no colgaba porque al parecer quería que Caín recordara. –Ahora que estamos hablando ¿Cómo está ese chico... el que peleó con Caín la otra noche?

Fue hace tiempo. Él está bien, pero mataron a Paul.

– Se lo merecía, drogó al contrincante –Bromeó Mark.

Sí, debimos haberlo pensado antes. Ya sabemos cómo es Darell con su niño de porcelana –Dijo bromeando. Caín rió negando con su cabeza.

– Está bien, Bruce. No te metas en más problemas ¿Me oíste?

Sólo me queda un objetivo más. De alguna manera hay que vengar a Paul ¿No?

– ¿Cuál es tu grandiosa idea Davent? No vayas a caer nuevamente en el juego de dañar a Caín.

A Caín no, es decir, no físicamente Rió. Pero es secreto Mark, luego lo sabrás hasta por el mismo Caín.

– Bien, no me gusta entrometerme en sus cosas. Nos vemos, Bruce. Que tengas un buen día y no vuelvas a llamar. –Colgó.

– Ya sé quién es –Dijo Caín poniéndose de pie, lo miré confundida hasta que recordé el momento cuando lo drogaron en las peleas y yo fui la que se lo dijo a Ian para que actuara. –Vámonos Cailín.

– Ve con cuidado Caín, ya sabes cómo son –Habló Mark antes de que saliéramos de la oficina. –Adiós Cailín.

No dije nada, sólo camine detrás de Caín hasta que salimos a la calle. El auto estaba estacionado un poco más lejos así que seguimos caminando hasta ya estar dentro de él.

– ¿Qué harás? –Le pregunté quitándome la capucha y mirándolo a los ojos.

– Lo que sea –Me respondió frío. Encendió el motor del auto y anduvo rápido hasta que logre divisar las calles cerca de mi edificio.

– No creo que sea necesario tantos problemas –Dije mientras me bajaba del auto, Caín se bajó sin decirme nada hasta que entramos al departamento.

CAÍN © #1 EN LIBRERÍASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora