Capitulo XXIV

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— ¿Entonces están peleados? —Pregunta Cassie. No respondo, desvió la vista y meto una uva en mi boca —. ¿Por qué no está almorzando con nosotros? —Sigo sin responder.

—He estado estudiando su actitud y la forma en la que nos ignora cuándo preguntamos algo sobre el tema de Matías, y he llegado a una conclusión —Habla Sam, acomodándose los lentes —. Es Matías el que está enojado, porque si fuera todo lo contrario, tu hermano estuviese aquí pidiendo perdón, pero como se trata de Samantha y ella es una persona que no le gusta disculparse, todo está mal. Y por supuesto no quiere hablar del tema y lo hace ignorándonos olímpicamente. —Fijo la vista en Sam y le doy la mejor mirada de muerte que tengo, haciendo que este baje la mirada.

— ¿Que le hiciste a mi pobre hermano, Samantha? —Pregunta Cassie, aparentemente enojada. Ruedo los ojos al cielo, sigo sin responderle —. Iré a preguntarle.

Pensé que bromeaba, pero cuando me doy cuenta se está levantando de su asiento, antes de que pueda dar un paso más, la tomo por la parte trasera de su blusa y vuelvo a sentarla de un jalón que le doy.

—¿Qué crees que estás haciendo? —Digo con la mandíbula apretada, puedo ver por el rabillo del ojo que Sam recoge sus cosas y se levanta de su asiento —. Ni se te ocurra irte Sam, porque a ti te sentare con un buen golpe en la cara. —Este se sienta de golpe y pone los ojos en blanco. Hoy estoy más que insoportable y no lo niego.

—Es que no quiero meterme en asuntos de chicas. —Dice.

— Te quedaras. —Escupo enojada, este asiente y baja la mirada —. No has respondido la pregunta que te he hecho. —Vuelvo a preguntar a Cassie. Ella no responde, haciéndome perder la poca paciencia que me queda. Me observa con ojos entornados y retadores.

— ¡Que hables, maldita sea! —Agrego.

— ¡No tienes el jodido derecho de obligar a Sam a que se quede! —Responde.

—No chicas por mi n... —Dice Sam pero lo hago callar cuando vuelvo a dirigirme a Cassie.

— ¡Responde mi pregunta! —Digo, la paciencia a salido completamente de mi sistema y juro que quiero golpearla por la forma en que me mira.

No dice nada, un suspiro entrecortado brota de mis labios y paso las manos por mi rostro tratando de calmarme.

—Ahora soy yo la que no quiere hablar, Samantha. —Dice con voz calmada, no se me pasa desapercibido el tono sarcástico que acompaña esa calma.

Entonces exploto, mi puño impacta en la mesa donde estamos almorzando, haciendo que las bandejas sobre estas salten y todo sobre ellas se derrame al piso y sobre esta. Sam se levanta de su puesto alarmado y Cassie aprieta su mandíbula y cruza los brazos en su pecho, sigue sentada no se levanta y sé que me está retando, sé que quiere demostrar que eso no la intimida. La miro directamente a los ojos y le hago saber lo malditamente furiosa que estoy. Tomo la bandeja que esta frente a ella y la arrastro por la mesa hasta que cae al suelo haciendo un ruido estrepitoso, ella pone los ojos en blanco y le levanta de su silla. Yo tomo mi bolso y salgo de la cafetería, tropezando a todo el que se interponga en mi camino y dejando atrás todas las miradas de los estudiantes. Antes de salir puedo ver que Matías -Que estaba sentado a un lado de nuestra mesa- Me observa con una mirada neutra, no veo nada en ella, ni rabia, ni decepción ni nada que me pueda ver cómo se siente respecto todo esto.

Antes de salir al patio trasero para obtener un poco de aire y calmarme, el timbre suena avisándome el comienzo de una nueva clase. Exhalo y camino hacia el aula, al momento de llegar me encuentro a Matías sentado junto a Sam, este último baja la mirada a su libro cuando me ve y Matías simplemente la desvía. Me tengo que sentar sola en la parte trasera del aula, Matías no se dignó a mirarme, en cambio yo no dejaba de mirarlo, sin que él lo notara por supuesto. La clase termina más rápido de lo que me esperaba, me propuse dejar de observar a Matías y prestar atención a la clase, solo faltan unas semanas para graduarme, así que decidí disfrutar las tonterías que dicen los profesores.

La Chica del Box (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora