La Chica del Box (EDITANDO)

Capitulo IX

El agua de los pequeños charcos dejados por la lluvia sale chispeante cuando pasamos por ellos a toda velocidad. Estamos subiendo de nuevo las montañas hacia el lago, Cassie viene detrás de mí en su nueva bici, una casi igual que la mía, solo que la de ella es el último modelo, pero eso no me afecta ya que ni así puede alcanzarme.

Es difícil llevarme el paso, pero esta mocosa me recuerda a mi cuando era más chica, insistente, terca, con amor por el boxeo y cariñosa... Claro que lo de cariñosa desapareció hace mucho tiempo.

Al llegar lo primero que hago es dejar mi bici tirada para ir a meterme al agua clara y caliente del lago, esta vez vinimos preparadas. Llevo un short corto y la parte de arriba de mi traje de baño, Cassie viste casi igual que yo, solo que su traje de baño es amarillo y el mío negro.

Veo que Cassie viene detrás de mí, vamos hacia la cascada, pero de pronto escucho que dice mi nombre. Vuelvo mi vista hacia ella y la veo salir del lago, frunzo el ceño confundida sin entender nada cuando mi vista se posa en donde dejamos las bicis, tres chicas golpean con un pedazo de madera gruesa mi bicicleta.

Salgo lo más rápido que puedo del agua y, cuando estoy más cerca puedo reconocerlas; son las tres chicas del pueblo cercano al nuestro con las que había peleado hace unos días. Veo que Cassie discute con unas de ellas la cual empuja su cuerpo haciéndola retroceder.

No, no, no. Son peligrosas, mucho.

— Que tal chicas...—digo al llegar, tomo a Cassie por el brazo y la coloco detrás de mí—. ¿Cómo les va? —digo con una sonrisa forzada. No quiero problemas ahora.

— ¡Oye! pero mira a quien tenemos aquí. —Dice la más baja de estatura—. Samantha Collen. Debo decir que te ves mejor de lo que te imagine ese día que luchamos, he tenido sueños muy eróticos contigo desde ese día que peleamos. —Termina, todas sonríen. La observo con molestia y una sonrisa llena de amargura aparece en mis labios que no se separan.

—Y... Ella ¿Quién es? ¿Son pareja?—Pregunta la más alta, mientras camina alrededor nuestro, Cassie aprieta mi brazo—. Está muy linda la chiquilla, pero... ¿No crees que sea muy joven? ¿O te gustan así collen? —Cuestiona.

—No es mi pareja, me gustan los hombres—Aclaro —. Mucho.

—Oh, por dios ¿En serio? —Dice la última de ellas. —. Mi amiga aquí presente —señala a la chica más baja. —. Quiere contigo. —La chica señalada hace pucheros.

—Que lastima —digo y junto mis manos —. Ya sabe que no se podrá. —Entrecierro los ojos, la miro y sonrío.

—Sí —Me mira de pies a cabeza —. Supongo que no se podrá.

—Y... Disculpen lo de la bici, de verdad no sabíamos que eras tú collen. —dice la más alta, coloca una mano en su corazón con fingida pena.

—No te preocupes, creo que no le hiciste mucho daño después de todo. —Sonrío, Cassie sigue detrás de mí.

—Claro. —Un destello de rabia aparece en su rostro, pero termina asintiendo.

—De todas maneras estaremos por aquí, por si nos necesitan. —dice la más baja, sonríe.

—Muchas gracias, lo tendremos en cuenta. —Las chicas dan la espalda y las veo alejarse, no me muevo de allí hasta que las veo lo suficientemente lejos.

—Creo que es mejor que nos vayamos, Sami. —Dice Cassie a mi lado. Miro hacia donde se fueron las chicas.

—Si nos vamos ahora, pensaran que estamos asustadas y puedo asegurar que nos van a querer emboscar en el camino. —Conozco bastante bien al tipo de personas como ellas, literalmente vivo en su mundo.