O27

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 Justin permanecía en el pasillo caminaba de un lado al otro de la consulta estaba impaciente por saber el estado de Amy. Pero nadie salía a informar. Ni siquiera sabía que era lo que tenía estaba tan bien, y de un momento a otro se había puesto a gritar y retorcerse de dolor. Lo único que Justin había visto es que no paraba de tocarse la tripa como si el dolor proviniese de allí. De pronto escuchó unos gritos. Se giró para el lado del que provenían y vio como Ashley y Ryan corrían hacia él ignorando las miradas asesinas de los doctores. Y para sorpresa de todos Ashley se tiró hacia él. Comenzó a pegarle puñetazos y Ryan tuvo que cogerla con todas sus fuerzas. Parecía una gata.

- ¡Maldito idiota! ¡Qué le has hecho! – decía mientras daba patadas al aire ya que Ryan la tenía sujeta de la cintura.
- Shhh cállate estúpida. ¡Si no quieres que nos echen! – dijo Justin en un susurro.
- ¡Escúchame bien! Si algo malo les pasa te juro que grito a los cuatro vientos quien eres.

Justin ni siquiera se había dado cuenta que Ashley había hablado en plural, refiriéndose al bebe que esperaba Amy sino que se había sorprendido por la actitud de la chica, sabía que era capaz de gritar quien era pero en el fondo poco le importaba solo quería saber que Amy estuviera bien y que todo hubiese sido un error.

Pero no hubo tiempo de más peleas porque justo en ese momento el doctor salió de la habitación donde tenían a Amy.

- ¿Ustedes son los familiares de la señorita Miller? – preguntó el doctor. Justin rápidamente fue hacia él, seguido de Ashley y Ryan.
- ¡Si, somos nosotros! ¿Díganos como se encuentra? – le dijo Justin desesperado.
- Está bien, ¿verdad doctor? – preguntó Ryan más calmado que Justin.
- ¿Qué es lo que le ha pasado? – preguntó Ashley casi llorando.

Ellos siguieron haciéndoles preguntas y el doctor se estaba empezando a cansar pues no le dejaban hablar.

- Si me dejan hablar les diré el estado de la señorita. – ellos se quedaron en silencio esperando la respuesta del doctor.– Verán... su estado es algo delicado... y más si está como está. Estuvo a punto de perder al bebe pero... – pero el doctor fue interrumpido por Justin.
- Com... como ¿ha dicho... bebé? – Justin había quedado en shock.

¿Estaba Amy embarazada? Entonces comenzó a confundirse. La ecografía era suya y no de Ashley. Pero ¿Por qué le había mentido? ¿Sería el niño suyo? ¿O seria de otro? Esas y más preguntas eran las que no paraban de rondar por su mente. Pero el médico lo sacó de sus pensamientos.

- Como iba diciendo, su estado es muy delicado no sabemos aún porque pero la placenta se encuentra muy débil y esto puede traer bastantes complicaciones.
- ¿Puede perder al bebe? – preguntó Ashley.
- La verdad es que si... pero esto no tiene porque ocurrir. Si mantiene reposo durante el embarazo y no se altera no tiene porque ocurrir nada.
- ¿Puedo entrar a verla? – preguntó Justin rápidamente.
- No es aconsejable... necesita descansar.
- Le prometo que será solo un momento. Por favor...
- Está bien pero que solo entre uno. – el médico se fue y Ashley comenzó a pelear con Justin.
- ¡No pienso dejar que entres a verla! No hasta que sepa que fue lo que pasó y que nada de esto fue obra tuya.  

 - No me importa lo que tú pienses. Entraré a verla. – dijo Justin muy consciente de sus palabras.
- Si das un solo paso más grito quien eres.
- Adelante... no me importa. Solo quiero verla. – Justin dio un paso hacia delante y antes de entrar a la habitación dijo algo más. – Si quisieras delatarme ya lo habrías hecho.
- ¡Quien se ha creído que es! ¡Se va a enterar! – pero antes de que pudiera decir nada más algo pasó.

Ryan se había abalanzado hacia ella y la había besado. Al principio se quedó parada pero luego siguió con el beso. Finalmente Ryan se apartó de ella.

- ¿Por qué has hecho esto? – preguntó Ashley confundida.
- No te hagas ilusiones esta vez ha sido para callarte.
- ¿Entonces lo que me dijiste antes de que me querías era mentira?
- Y a ti qué más te da... ¿Estás con Kameron no? No creo que te importe lo que yo sienta.
- Si... sí que me importa. Dime ¿era verdad?
- Creo que eso deberías de saberlo ya.
- Pues no, no lo sé.
- ¿Cuántas veces he de decírtelo para que me creas? Ashley si te quiero... pero tú estás con Kameron... así que no hay nada que hacer.
- Te equivocas... yo no quiero a Kameron así que voy a cortar con él. Y cuando eso pasé seré libre de estar con quien yo quiera.

Ryan no le dijo nada simplemente la besó pues a veces un hecho vale más que mil palabras.

Mientras en la habitación yo estaba tumbada en la cama. ¿Qué se suponía que hacia allí? Lo último que recordaba es que estaba en la estación con Justin y entonces... ¡JUSTIN! ¿Dónde estaba él? ¿Lo habrán descubierto? Me incliné hacia delante dispuesta a levantarme pero entonces escuché un ruido. Era la puerta alguien había entrado. Miré hacia allí y lo vi. Con el rostro serio, su rostro expresaba angustia y preocupación. Entonces corrió hacia mí y me abrazó. Yo me quedé sorprendida no esperaba esa reacción por su parte pero enseguida correspondí al abrazo. Me sentí reconfortada de nuevo. Entonces sentí como pequeñas gotas me humedecían el hombro. ¿Estaba llorando? Yo lo separe de mí pues quería verle la cara.

- ¿Justin estás llorando?
- ¡No vuelvas a darme estos sustos! Pensaba que me ibas a dejar. – yo dejé escapar una sonrisa. Era la primera vez que me demostraba que de verdad le importaba.
- ¿Qué es lo que me ha pasado?
- Amy el doctor me ha dicho que estas esperando un bebé. Pero yo quiero oírlo de tus labios. ¿Es cierto? – así que el doctor se lo había dicho... en ese momento me decepcioné pues deseaba que yo hubiese sido quien se lo había dicho.
- Si... estoy esperando un bebé... tuyo.
- ¡Oh Amy! No sabes...
- ¿Qué pasa? ¿No quieres hacerte cargo?
- ¡Como puedes pensar eso! Iba a decirte que me haces el hombre más feliz del mundo.
- ¿De veras?
- ¡Claro! Tú y ese bebé... – dijo tocando mi vientre – Es lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo. Tú me has enseñado muchas cosas. Pero en especial me has enseñado a amar... algo que había olvidado desde hacía mucho tiempo. – esas palabras me habían emocionado. ¡Justin me quería! ¡Íbamos a ser una familia feliz!  

Secuestrada en mi propia casa. ➳ j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora