Es gracioso sentir que no vales una mierda. ¿Qué pasaría si muriera? ¿A quién le importaría que yo ya no estuviera? ¿Alguien lloraría?
Vivimos en un mundo regido por normad absurdas que nos impusieron y que aceptamos porque creemos que solos no podemos cambiarlas. Vivimos en un lugar donde mires donde mires, hay dolor, sufrimiento, llanto y maltrato. Vivimos en un espacio limitado al pensamiento racional que tacha de raros a gente que se atreve a pensar en algo mejor.
¿Quien no sueña en despertar algún día, mirar a través de su ventana, y ver que se encuentra en una rústica casa en el prado, con unas vistas al mar mientras ves a gente paseando en elegantes trajes y sombreros, otros viajando en carroza, el cielo azul y música en las calles? ¿Quién no siente que ha nacido en la época equivocada?
Esta es la época de la depresión. Los niños de ahora somos unos jodidos conejitos de indias para gente que quiere saber hasta donde puede hacernos pasar. El estrés, la sociedad, las normas, las modas, estamos tan condicionados que un paso en falso se traduce en cientos de comentarios negativos hacia nuestra persona.
Somos el futuro, vivimos en el presente, pero aquellos que vivieron en el pasado se encargan de pisotear nuestros sueños.
Yo miro por la ventana y sigo sin ver aparecer la carroza que me llevé lejos de aquí. Solo veo una calle manchada de graffitis y basura que la gente no se molesta en tirar a un contenedor. Yo solo quiero volver al pasado donde nada parecía importar, quiero sentir que estoy dentro de una historia con argumento y alegrías. No dentro de una vida sin aparente sentido.
Por mucho que lo intente los cortes en mi cuerpo no me llevan lejos, tan solo me recuerdan que estoy viva en un lugar donde todos están muertos.
Al parecer, amar la poesía, escuchar música alternativa y desear vivir en otra época es de gente extraña, porque todos se rien de mi cuando lo digo. Me señalan y chismorrean cosas pero en el fondo, no se alejan de mi, porque se que ellos también tienen sus peculiaridades pero tienen miedo de que el hazme reir pasen a ser ellos. Por eso odio este mundo y por eso siempre lo odiaré.
Nadie es libre. Nadie es él mismo. Nadie es feliz. Nadie está bien.
¿Cuando fue la última vez que sonreiste? ¿Y la última vez que no lo fingiste?
Hay mucha diferencia entre sonreir y ser feliz.
Llorar es de débiles. Ser listo de friquis. Leer de extraños. Ser tímido de antisociales. Escuchar música diferente de bichos raros. Vestir de negro de suicidas. Amar de cursis. Temer de cobardes. ¿Por qué nos hace esto la sociedad? ¿Por qué no podemos ser nosotros mismos?
Se tú mismo, los demás puestos están cogidos.
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No se como mierdas lo hago que cada vez este día es peor, si me muero será de deshidratación de tanto llorar.
