Allegiant: Final Alternativo - Resurgente: Después de Leal [TERMINADA]

Capítulo 17

Capítulo 17

TRIS

– Nos iremos por la mañana.

Observo por la ventana de la oficina de Johanna. Desde aquí arriba pueden verse los campos de Cordialidad, y varias bancas de la cafetería. Es un lugar extraño, todo es paz  y armonía. Jamás podría acostumbrarme, ya no. Quizás, antes de convertirme en Osada, al vivir durante tanto tiempo en Abnegación lo habría conseguido, pero si me costó adaptarme la primera vez que estuvimos aquí, ahora se me está haciendo insoportable. Demasiados recuerdos agolpan mi cabeza y, siento como si hubiera sido ayer que perdí a mis padres.

– Los iré a buscar a la cafetería con quien los acompañará con el camión hasta los bordes del campo.

– Muchas gracias, Johanna.

– Es un placer poder ayudar – volteo hacia Johanna, esta hablando con Tobias –, aunque sea por poco tiempo.

– Solo necesitamos unas horas. Parar a descansar y mañana continuaremos. Tris y yo llevamos dos días sin dormir.

Al oírlo, recuerdo que no he dormido anoche, de la reunión hemos ido al edificio Hanckook y de allí en busca de Christina y Zeke.

– Puedo verlo –llevo mi mano hasta debajo de mis ojos y comprendo a lo que Johanna se refiere, no necesito ver para saber que bajo mis ojos asoman oscuras ojeras, ya que puedo sentirlas bajo mis dedos.

– Podrán utilizar la habitación que utilizaron cuando estuvieron aquí, – anuncia ella –. Si no recuerdan dónde es un cordial los acompañará luego de cenar, y llevará también a Christina y a Zeke a una habitación, y los jóvenes a otra.

– Muchas gracias, Johanna– hablo por primera vez desde que he subido aquí arriba.

– Es todo un placer, Tris.

Tobias me rodea con uno de sus brazos y antes de que salgamos de allí observa a Johanna.

– ¿No tendrán un poco de ese suero de la Paz? – pregunta burlándome y no puedo evitar soltar una risita.

Recorro los pasillos de cordialidad, todo aquí es tranquilidad, nada irrumpe la paz que se respira en la facción.

Salgo del complejo, los campos de cordialidad aparecen frente a mí y camino hacia ellos, puedo ver a los cordiales trabajando, todos con una sonrisa en su rostro, disfrutan de la vida, viven cada día a pleno.

El viento pasa a través de mi ropa y el  cabello me azota la cara, levanto una mano para apartarlo, pero cuando lo hago, descubro que no podré hacerlo, ya que llevo el cabello largo. Continúo caminando  y todas las miradas cordiales se fijan en mí, nadie ignora mi presencia y muchos niegan con su cabeza al verme pasar. Cuando una niña susurra algo a su madre, observo hacia abajo y descubro que no solo mi ropa es negra, si no que llevo un arma en mis manos y varios cuchillos ensangrentados cuelgan de mi cinturón.

Levanto la vista y todos han desaparecido, el campo esta desierto. Las cosechas han desaparecido y por el aspecto, podría jurar que no ha habido gente aquí durante años.

Oigo un ruido, al voltear un cuervo se acerca a mí, sin siquiera pensarlo disparo en su dirección, un tiro certero, pero en el momento en que la bala atraviesa el ave, en vez de oír un graznido, oigo un grito humano y en vez de ver caer el cuerpo del pájaro, veo una figura humana.

Mantengo la compostura y me acerco a ella, pero siento que todo se derrumba cuando el rostro del cuerpo me es familiar: Will.

Un grito escapa de mi garganta y, al levantar la vista descubro que todo se ha oscurecido, las nubes han tapado el cielo y Christina me observa aterrada.

–Lo mataste – anuncia – al igual que a Al.

– ¡No! – Grito – ¡Yo no lo mate!

– Si lo hubieras perdonado jamás habría saltado del abismo – me recuerda–. Tú lo mataste, al igual que a Will, todo es tu culpa.

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¡Buen día a todos!

Miércoles y día de capítulo corto.

¿Qué les pareció?

Cómo habrán visto, debido a la gran cantidad de comentarios alentadores, los votos y las infaltables lecturas de muchos lectores he estado actualizando mas de una vez a la semana, cuando tengo tiempo.

¡Qué lo disfruten!

Be brave!