Que Steve era un hombre celoso era algo que sabía y tenía asumido desde mucho antes de que le inyectaran el suero. La primera vez que sintió celos fue, lógicamente, cuando empezó a tener sentimientos por Bucky y le veía salir con todas esas chicas mientras él tenía que tragarse todo lo que sentía y llevar la procesión por dentro. Además por entonces estaba tan acomplejado por su físico que pensaba que nadie le iba a corresponder nunca y que tendría que resignarse a una (probablemente corta, eso sí) vida de sentir celos de otras personas.
Al final, afortunadamente, eso no pasó, pero aunque muchas cosas cambiaron con su transformación, su inseguridad en temas románticos persistió. No había más que ver cómo el famoso incidente de la fondue de Howard y Peggy se resistía a caer en el olvido.
Su nueva vida después de despertar en el siglo XXI podría haber sido la oportunidad perfecta para olvidarse de todo eso, pero pronto comprobó que en ese sentido iba a seguir igual. Primero había sentido muchos celos hacia Pepper cuando pensaba que jamás podría tener a Tony, y aun ahora, después de tenerle, cuando todo marchaba bien entre Tony y él, no podía evitar estar celoso en determinadas situaciones.
Por ejemplo, en lo que respectaba a la mencionada Pepper. A veces ella se pasaba por la base o si Steve y Tony iban a L.A. quedaban con ella, y Steve se alegraba mucho de que ella y Tony se llevaran tan bien, de verdad. Cuando Tony y ella cortaron por culpa de Steve, a este le supo muy mal haberle hecho daño y que Tony perdiera a una persona tan importante en su vida. Por suerte con el tiempo Tony y Pepper habían conseguido recuperar buena parte de su amistad, incluso alguna vez Steve y Tony habían salido en plan cita doble con Pepper y su prometido. Pero claro, Steve veía a Tony tratar a su ex con tanta familiaridad y reír y coquetear con ella y bueno... Se decía a sí mismo que no era tampoco tan diferente a la relación de amistad que él mismo mantenía con Natasha, pero había oído eso de donde hubo fuego cenizas quedan, y una pequeñísima parte de él se preocupaba.
Esa pequeñísima parte de él era un poco menos pequeña cuando se trataba de Bruce, quizás porque Pepper le caía mucho mejor que el doctor Banner. Que no es que tuviera nada en contra de él, no era mal tipo en absoluto, pero no le había gustado la manera en la que había tratado a Natasha, eso era todo. Y con Tony... Bueno, Tony ya sabía que Steve tendía a sentirse desplazado cuando estaban Tony y Bruce juntos, porque hablaban de cosas que Steve no entendía y Bruce le aportaba cosas que Steve jamás podría darle. Y eso no era malo, al contrario, podría decirse que Bruce para Tony era como Sam para Steve (que por cierto últimamente Sam y Tony solo se toleraban a medias), así que Steve lo respetaba, en serio, pero a veces pasaban cosas que hacían que a Steve le costara más mostrarse tan comprensivo.
La última: después de un larguísimo y difícil día de trabajo, Steve y Tony se habían retirado a su habitación para ver una película juntos y disfrutar de un poco de tiempo para ellos dos solos. La peli pronto había quedado olvidada en favor de una placentera sesión de besos y caricias que ya estaba escalando a algo más. Pero antes de que las cosas progresaran como habían de hacerlo, el móvil de Tony había empezado a sonar.
—No lo cojas —le suplicó Steve, entre besos, pero Tony no le hizo caso y alargó su mano para coger el dichoso aparato.
—Lo siento, cariño, pero es el tono de llamada de Bruce y no puedo ignorarlo —le dijo Tony, dándole un beso a modo de disculpa y llevándose el móvil a la oreja—. ¡Pero bueno! ¡Si resulta que sigues vivito y coleando! ¿Cuánto hacía que no me llamabas, sinvergüenza?
Steve no escuchó lo que contestó Banner, pero Tony estalló en carcajadas y sin mirarle salió de la habitación para hablar sin que les molestaran.
Steve se tragó la frustración, se dio una ducha bien fría y fingió estar dormido cuando Tony volvió – mucho rato después.
Pero en fin, esos eran casos aislados. El mayor problema era que, además de Pepper y Banner, estaba también el resto de la humanidad. Steve era consciente desde el principio que Tony era un hombre de mucho éxito, que antes de estar con él y con Pepper había tenido una larga lista de amantes. Pero claro, saberlo era una cosa y verlo con sus propios ojos era otra.
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[Avengers Fic Stony] Pedacitos de Ti
Fanfiction[Steve/Tony slash] Post-Ultrón, secuela de Algo para Recordar & Incondicional. Fragmentos de la vida en común de Steve y Tony en la base junto al resto de Vengadores. Sigue el canon hasta Ant-man sin tener en cuenta la segunda escena post créditos y...