Capítulo 23: "Estoy bien".

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"Quiero saber quién eres, quiero saber por donde comenzar, quiero saber como te sientes".

  —Fall To Pieces, Avril Lavigne. 


Martes.


—Abigail, ¿Que haces allí cariño? — abro mis ojos lentamente para encontrarme con la mirada de Annie, abrí los ojos como platos y me estremecí, como me estremecí muy fuerte terminé cayendo al suelo con mi sábana aún envuelta en mí. Levanté mi vista y pude ver a Annie detrás del sofá con sus manos en la boca.

—Oh, nada, solo que... — cajón de mentiras, no me falles ahora— Scott estaba roncando muy fuerte... y no podía dormir, así que dormí en el sofá. — puse una sonrisa falsa en mi cara para hacerlo más creíble. Realmente no sabía si Scott roncaba o no.

—Entiendo. — soltó una risilla mirando al techo— ¿Quieres ayudarme a preparar el desayuno? — quité un mechón de mi pelo que estaba en frente de mi nariz y asentí sonriente, Annie caminó alrededor del sofá, se paró en frente de mi para estrecharme su mano y ayudarme a levantarme.


Después de preparar el desayuno, Scott y yo no nos dirigíamos la palabra, cuando Scott llegó a la cocina me vio salir de esta y aprovechó que me fui a la sala intento darme un abrazo sin que su madre me viera pero yo lo aparté, de algún modo me sentía un poco débil cuando lo veía a los ojos, como si mi cuerpo dejaba de perder su energía o creo que él no es la razón. A sus padres no le importó mucho que no habláramos en el desayuno, dado que comenzaron a contar más historias y cuando volteaban a verme ponía una sonrisa en mi cara y fingía que todo estaba bien. Cuando los padres de Scott terminaron de comer solo quedábamos Scott y yo en la mesa. Annie le susurro algo en el oído a Johnny y éste asintió para luego Annie tomar de la mano a Johnny e irse los dos a la cocina.

Yo aún seguía moviendo mi jugo de naranja mientras veía como el hielo se desvanecía poco a poco, tomé del jugo y luego lo dejé cerca del plato, para luego relamer mis labios atrapando un poco de jugo que quedó arriba de mis labios. Scott tiró el tenedor en el plato haciendo que me sobresaltara por el sonido irritante que causó el tenedor al caer.

—¿Sabes? esto no me gusta. — manifestó molesto, reposando su espalda en la silla y cruzándose de brazos como un niño regañado.

—¿Y crees que me gusta a mí? — pregunté en tono serio y calmado, aún no quería empezar la ola de gritos.

—Pareces disfrutarlo.

—Es solo apariencia, no sabes como odio esto.

—Yo también odio esto. — su voz parecía querer quebrarse, se escuchó el sonido de algo romperse en la cocina haciendo que los dos nos sobresaltáramos, Scott se llevó una mano a la frente y yo fruncí el ceño— 1, 2, 3, Johnny y Annie fuera. — ordenó, como en el juego de las escondidas, Annie y Johnny se levantaron del suelo y fingieron que estaban limpiando su ropa, Scott apuntó hacia las escaleras y estos fueron hacia ella, para luego irse a su habitación.

—¿Estaban espiando?

—Sí, ellos son así, bueno, solo quería decirte que me importas mucho y que no me gusta que estemos peleados porque te amo mucho. — ¿Escuchan ese sonido? soy yo vomitando miel, azúcar y arco iris; porque esto SÍ que fue muy cursi.

—Esta bien. Primera y ÚLTIMA vez. — alcé mi tono de voz en la penúltima palabra haciendo que sobresaliera en la oración como advertencia, éste asintió y yo sonreí. Se levantó de su silla y se paró enfrente de mí con una gran sonrisa, yo me levanté para quedar cara a cara y éste me abrazó, nos quedamos así un rato, Scott comenzó a tocarme el cuello y luego tocó mi frente con un poco de desespero, metió su mano bajo mi camiseta y comenzó a acariciar mi espalda, yo tenía el ceño fruncido sin saber lo que trataba de hacer. Pero espero que no lleguemos a segunda base.

AbbeyWhere stories live. Discover now