Capítulo 12.

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Otro día detestable empezaba, hoy tendría ensayo con los chicos. Aún seguía con esa duda, ¿debería de invitar a Damon? Mejor... No.

Hoy era la clase de psicología y teníamos que hacer equipo...

¡Oh no! JEZORRA LO INVITARA.

Me levanté, sin ganas otra vez, tendría que pensar que haría.

(...)

Llegué a la escuela, fué raro que Damon no me venga a buscar, pero bueno. Me senté en mi lugar, allí se encontraba Ronald. Bueno, Ron.
Me saludo con amabilidad.

-¿Que hay? -Sonrió.
-Nada ¿y tú? -Apoye mis cosas en el escritorio.
-Pues, te estaba esperando. -Abrió su carpeta.- ¿Irás al baile? -Me miró.
-Si. -Le sonreí. Abrí mi carpeta de nuevo.
-¿En serio? ¿con quién? -Parecia curioso, se ve que no irradiaba un clima de "atraigo chicos siempre, je." ¿Tan antisocial me veo?

"-Con esas ojeras, yo te llamaría freek.-"

Ja...

-Iré sola, ya que... Pensé; muchos chicos me invitaron y decirle solo SÍ a uno, quedaría como una maldita. -Dije sarcástica. El sonrió de lado.- ¿Por qué lo preguntas? -Frunci el ceño.
-Porque, pensé que te había invitado alguien. -Rió.
-Oh... Pues no ¿y a ti? -Lo miré.
-Mmmh... Algo así. -Rió.

En realidad reimos los dos, en eso se escucho como la puerta y risas, invadian el espacio que habia entre la puerta y nuestro escritorio.

Eran ellos... Oh por Dios.

JEZORRA Y DAMON.

¿Juntos?

Miré con ira. ¿Se suponía que los salude o que?

-Hola. -Me saludó él. Lo quedé mirando unos segundos sin reaccionar y le sonreí.
-Hola... -Casi suspire.
Él se fué tras ella, claro, tenían que hacer el puto trabajo juntos.

Bajé mi mirada...

Auch, justo en mis sentimientos.

Trate de seguir normal y, lo fingia muy bien. Sophie habia llegado tarde, pero igual me saludó y se fué con John, al menos ella no disfrutaba de la compañía de John, como Damon si de Jezorra.

¡ASH LO ODIO!

(...)

-Pueden salir al recreo. -Ordenó el profesor.
Algunos se paraban y se iban al segundo, yo esperaba Soph.
Ella vino y se sentó a mi lado, claro Ron se había ido a jugar cartas con sus amigos.

-¡Hey! ¿todo bien? -Dijo Soph, estaba de buen humor.
-Si. -Dije desganada.- ¿Porqué no viniste ayer? Tuve que sentarme con Damon. -Frunci el ceño y me cruce de brazos, parecia una pequeña consentida.
-Ja... -Soltó.- Salí con Joe. -Sonrió.
-¿Y porqué no me lleva... -Reí.- Ahhh... Ya entendí. -Las dos sonreimos pervertidas.
-Exacto. -Me guiño un ojo, y volvimos a reír. Esto me mejoraba, al menos, algo el día.

Se escucharon risas detrás de nosotras, agh... Eran ellos.

-¿Ya lo viste? -Le dije, mientras nos volteabamos levemente a ver.- Parece que ahora tiene una nueva amiga. -Rodé mi ojos.
-¡Uy! ¿de que me perdí? -Dijo con voz de "chusma", yo la miré.
-De nada. -Dije seria, y me voltee rápido a mí lugar.
-¿De nada? ¿segura? -Vi que sonrió.
-Es un odiota... Encima ahora tengo que ir a ensayar con él y... -Me interrumpió.
-Creo, que hay una parte de la cual no me enteré y no me contaste. ¿Que sucedió? -Me miró seria.
-Eh... -Tartamudue.
¿Debía decirle lo del beso?
-"Eh" que. -Insistió.
La miré resignada y me entró el valor para contarle, me daba mucha vergüenza. Y mas sobre esto que no me habia pasado jamás, bueno exceto por que pasó.
-Damon... -Me acerque a ella y le susurre.- Él, bueno... -Decidí no contarle.- Me invitó a su casa.

Extrañamente yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora