Nadie en el instituto se dió cuenta de que estaba mal, incluso peor que ayer, y nadie quiso preguntarme si hoy me sentía bien, pues no querían hacerme recordar lo de mi padrastro, Asi que, Aunque me doliera, era facil fingir que nada pasaba, solo quería irme a mi casa y escuchar música sin pensar en nada.
Las clases fueron las más largas de mi vida, Matemáticas, Lenguaje e Historia, sin duda el peor día, lo que me hacía decear aún más irme de ese esfixiante lugar.
Llego el momento esperado, alfin sonó el timbre, solo quería correr lo más rápido para llegar a mi casa.
Corría por la vereda y no evité pensar en lo mal que debe de estar mi madre, ya estaba llegando a mi casa, pero me detuve al escuchar gritos, miré por la ventana y al ver lo que sucedía adentro quedé atónita, No podía creer lo que pasaba y sin duda no podía hacer nada.
Me alejé corriendo de ese miserable lugar, no me importaba adonde iva ni que haría, solo quería olvidar, olvidar todo y mientras miraba las casas pensaba "de seguro las demás familias son felices" "¿porque esto me pasa a mí?" "Ojalá todo fuera como antes", pero algo me sacó de mis pensamientos.
Estaba sudando, me sentía mareada y quería vomitar, mis ojos estaban hinchados de tanto llorar y sentía como se debilitaban mis piernas y mis rodillas se doblaban, hasta que caí al suelo.
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Sin limites
RandomLaura es una chica que tenía una vida relativamente normal hasta que nota actitudes raras de su padrastro. Vive en las cadenas de Pablo, Recibe malos consejos y sufre miles de decepciones, su vida no podía ser peor, pero llega algo o mejor dicho alg...