—¡Pero que cara más dura tiene el desagradecido! —grita Elena—. ¡Se lo tiene bien merecido! Si yo hubiera estado en tu lugar, le habría arrancado la cara.
Elena siempre ha sido protectora conmigo. Su fiereza sale del color de su cabello pelirrojo, como el fuego ardiente de una fogata. Sus ojos verdes oscuros son un enigma para todos, por lo que se puede llegar a sentir. Una chica tan guapa como ella rechazó el estar con los más populares para estar con verdaderos amigos, nosotros.
—Por una vez, estoy de acuerdo con ella —dice Denis mientras señala a Elena—. No se merece ni sentarse a tu lado. Debería darle un escarmiento en cuanto lo vea.
Denis es un chico guapo de ojos azules marinos que recuerdan al mar, su cabello azabache como las plumas de un cuervo está un poco despeinado, pero lo deja atractivo. A pesar de tener una barriga más o menos grande, sus brazos fuertes y su altura infunden temor a todo aquel que intente insultarle por su obesidad.
—Mejor no hagas nada —le digo.
Conversamos de varias cosas durante el tiempo del recreo, que no es mucho, pero aun así da para matar el tiempo.
—Roy me ha pedido una cita —dice Elena de golpe, con una voz cantarina que muestra su ilusión.
Roy es el lider del equipo de fútbol del instituto. Es alto como nuestro amigo, pelo negro con mechas rubias que dejan mucho que desear, ojos rojos que acompañan el cabello de Elena y cuerpo bien trabajado. Está enamorada de él desde hace un par de años, cuando sin querer tropezaron y los dos se pusieron a conversar. Hasta el momento son amigos, pero yo creo que Roy está colado por Elena, se le nota cuando está cerca, que se sonroje cuando está cerca no es de querer ser solo amigos.
—¡Por fin lo hace! —parece que Denis está un poco molesto—. Sabía que lo haría en algún momento.
—¡Enhorabuena, Elena! Seguro que te da el beso que siempre has estado esperando —estoy contento por ella, su entusiasmo es todo lo que necesito ver para saber que de verdad desea estar con él—. ¿Y cuándo es la cita? —mi mirada traviesa quiere datos.
—Pues este fin de semana.
—Un momento —interrumpe el grandullón—, este fin de semana íbamos a quedar todos para ir al cine y cenar.
—Lo haremos el siguiente fin de semana —le detengo antes de que se llegue a enfadar—. Esto es importante para ella.
—Está bien —pone los ojos en blanco, nunca lo había visto tan molesto.
Faltan cinco minutos para que toque el timbre. Seguimos conversando hasta que Elena me anuncia algo desastroso por mi espalda.
—Mira quien viene por ahí —me doy la vuelta y lo veo.
¡Oh, no! Es el homofóbico de Lenko. ¿Qué querrá ahora? Mejor será esquivar esta charla antes de que empiece una pelea entre nosotros, y no quiero eso en este preciso instante.
Llega hasta ponerse a un par de metros de mí y respira hondo.
—Kyle, ¿podemos hablar? —mira a mis amigos—. ¿A solas?
—Va a ser que no, si quieres decirme algo va a ser delante de ellos -le miro enfadado, esta vez de los muchos días que he pasado con él ha sido el peor.
—Es algo importante —mira a otro lado como si estuviera mirando algo, o alguien.
Miro a mis amigos y les digo con la mirada que se marchen, que estaré bien. Ellos me hacen caso y, con una excusa muy tonta, se van, incluso Elena ha tenido que empujar a Denis para que se fuera porque no quería. Solo puedo ver sus ojos furiosos echando chispas.
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¿Un Amor Real? (Gay/Yaoi) YA EN AMAZON
Teen FictionLa vida de Kyle no cambia nada cuando cuenta que es gay. Al contrario, le ha ido a mejor. Pero esa mejoría cambia cuando el chico más popular del instituto llamado Lenko le pide una cita de apuesta. Desde ese día, para Lenko y Kyle ya no es igual ve...