Hola Ryan

Carta 1

Cherry Wine, Hozier.

Querida Edurne,

Sé que quizá te sorprende recibir esta carta, pero creo que toma más encanto cualquier tema del que te escriba, si, además de escribírtelo a ti (en quien siempre he confiado), te lo escribo en forma de carta y no en un simple e-mail.

Pese a que nunca hayamos sido muy cercanas, eres (ahora que te has ido a Andalucía) la única persona neutra de confianza a la que puedo hablar con total franqueza.

Tengo miedo de que empiece el curso. Sé que va a sonar algo egocéntrico (dado que tú te has mudado a Sevilla, mientras que yo sigo aquí, en Zúcar, con todas nuestras amigas) pero me asusta que al irme a estudiar bachillerato a Dararla (al I.E.S Gustavo Adolfo Bécquer) puesto que sé que me acabaréis olvidando, si es que no os he olvidado yo antes.

También sé, si me contestas, lo que me vas a decir; no te ofendas, pero no quiero oír más "verdades" sin ningún tipo de certeza, sólo quiero, (bueno, en realidad sólo necesito) que alguien me tranquilice demostrándome que eso no va a ser así. Tal y como han ido las cosas durante el curso y durante el verano, creo que siento una especie de nostalgia, no tanto por el final de éste, sino por lo que éramos.

Luego está la siguiente parte, la más aterradora: ser la nueva. Sonia ya me dejó bien claro hace unos días que era un estorbo para ella y su plan "empezar de cero". No me gustó que me viese como un koala que se agarra y dormita todo el día en una rama, más que nada porque no soy esa clase de persona. Sin embargo, lo que más me dolió fue verme aún más sola.

Le dije a Abril que tanto si me iba a estudiar a Dararla como si no, de alguna manera, algo en mí moriría: irme sería pegarme un tiro al corazón y quedarme, sería dispararme en la cabeza.

Intentaré escribirte la próxima semana y... no sé, ya te contaré cómo me habrá ido el primer día de (después de todo) mi nueva vida.

Te quiere,

Amanda.

P.D: Espero que te vaya genial en Sevilla.