[PAUSADA] Roommate (Yoongi)

Capítulo 15

Pastel y cerveza.

¡Vaya forma de festejar un cumpleaños! Sola, en el departamento, viendo dramas coreanos deprimentes, con una bata y el cabello mojado.

La verdad era que su día no había sido tan malo como aparentaba en esos momentos. Sus compañeros de la universidad la felicitaron, e incluso varias lectoras. Le dieron algunos regalos, y pasó un rato lindo con sus amigos más cercanos, con los que luego de clases fue a tomar un helado. Pero esos habían sido como sólo cuarenta y cinco minutos de relajación.

Tampoco había que olvidar la felicitación de los que había dejado en Busan, puesto que hizo una videollamada con su hermana, y sí, sus amigos y familiares la vieron en un aspecto lamentable, pero aún así le cantaron el feliz cumpleaños y le mostraron la torta que uno de sus amigos prometía guardarían hasta que ella los fuera a visitar algún día. Pero todos sabían que eso no era cierto.

También recibió muchos mensajes y fotos fueron publicadas en las redes sociales etiquetándola. Se sentía bien esa atención y ese afecto, aunque la realidad era otra. Bien podía tener muchas personas que la quisieran, pero no podían estar ahí físicamente. Así que por muy popular que pareciera y por mucho que luciera como si se estuviera montando la gran fiesta y habría que ofenderse si uno no era invitado, no era cierto. Esa no era la verdad.

Los que la conocían lo sabían. Ella no era de ese tipo de personas. Por lo que tomó el bote de pollo frito y le dio una brusca mordida a una pieza, sin arrepentimiento alguno.

-Mierda.

Había sido muy fuerte. Se miró en la sucia pantalla del celular, y alcanzó a notar cómo efectivamente, caía sangre de su encía superior.

Se levantó poniéndole pausa al televisor y corrió hasta el baño, atormentada. Humedeció su dedo índice y mediano y masajeó la zona afectada con delicadeza.

Pero entonces su maldito móvil comenzó a sonar, y ella aún estaba sangrando. Al encontrarse irritada y estresada por la situación y el molesto timbre que no la dejaba pensar, no tuvo más opción que atender.

-¿Qué quiedef?

-¿Yeongji? -una voz masculina confundida se oyó al otro lado-. ¿Eres tú?

-¿Y tú quién edef?

-¿Por qué hablas así? -se notaba la confusión del muchacho.

-Edo no te incumde. ¿Quién edef?

-Jin... soy Jin.

Yeongji frunció el ceño y como si no pudiera creérselo, retiró unos segundos el teléfono de su oído para mirar el identificador y confirmarlo. ¿Por qué no había hecho eso en primer lugar? Cachetada mental.

-¿Jin? ¿Pod qué llamad?

-¿Por qué hablas así?

-¡Podque me sangda la encía! Y no quiedo tlagalme la sangde.

-Pues... primero, feliz cumpleaños. Verás, estoy con Yoongi, y hablé con él y queríamos preguntarte si querías salir con nosotros. Para... ¿festejar? Pero si estás ocupada...

-No, no. Edtoy bien, ya me pepado. Led mando un mensaje cuando edté lidta.

Cómo pasar las mayores vergüenzas, un libro escrito por Kwon Yeongji. Sería un best-seller, ya lo imaginaba, bueno... eso si a alguien le interesaba el hacer el ridículo frente a los demás. O incluso ni frente, ¡había sido a través de una llamada telefónica!

Sólo esperaba que la excusa de «es mi cumpleaños» lograra que se apiadaran de ella y no le hicieran ninguna broma al respecto.

Yoongi. Seguro que Yoongi había escuchado todo. Demonios, cada vez le daba más razones para no fijarse en ella.