La semana había pasado demasiado lenta, era la hora de decirle a Chris quien soy, de decirle que su mejor amiga ha estado frente a el estos últimos días.
Era la clase de matemáticas, en unos momentos la clase se terminaría y el receso comenzaría, tenía la hoja en blanco, necesitaba enviarle una nota para que pudiéramos hablar.
Alguien me lanzó una bola de papel, miré el aula, la profesora estaba escribiendo unas cosas en la pizarra, no encontré al culpable, volví a centrar mi mirada en la pizarra.
-Psst-. Escuche en algún lado del aula.
Miré el lugar nuevamente, alguien me estaba molestando, no sabía quien era, no conocía a nadie, solo a Cordelia, pero la odiaba, Chris no estaba en esta clase, el estuvo en matemáticas la clase pasada, vi a Charles, que me miraba con una sonrisa.
- ¿Qué quieres?-. Pregunté molesta.
- Ven a mi fiesta hoy-. Dijo con una sonrisa.
Iba a decir no, pero me retracté, sería un buen lugar para decirle a Chris, sería el lugar perfecto.
- ¿A que hora es?-. Pregunté finalmente.
- Empieza a las cinco-. Dijo mostrando sus dientes.
Asentí, tomé el bolígrafo y comencé a escribir.
¿Irás a la fiesta de Charles? Necesito hablar contigo, yo te busco =)
Por cierto, eres lindo :D me caes bien y me caías bien antes de todo esto...
Desprendí la hoja del cuaderno y la doble, me esperaba una laaaaaaarga tarde y era momento de decir la verdad para después huir, era un plan, la campana sonó, me puse pie y camine hasta la puerta, después me eche a correr y corrí hasta los casilleros, mire a todos lados, todos parecían demasiado ocupados, deje que la nota se adentrara en el casillero y actué como si simplemente me acercara al mío, puse la clave y saque los libros de la mochila y los deje en el casillero, metí los libros de las demás clases.
Escuche pasos cerca, mire de reojo, Chris venía con una sonrisa, se acerco hasta su casillero y lo abrió, la nota cayó al suelo y el la recogió.
- ¿Viste a la chica que dejo la nota?-. Preguntó mirando a todos lados.
- No...-. Dije encogiéndome de hombros.
Era mentira, sabía perfectamente quien era la chica de las notas, de cualquier manera, hacía falta poco para que se enterara de que era yo.
Algo cayó de mi casillero, tomé el papel y lo desdoblé, era una nota, no sabía de quien carajos era...
Estoy seguro de que eres hermosa
Hice una mueca y la volví a meter en el casillero, salí pitando de allí, tenía los nervios de punta ahora, no quiero saber como estaré cuando le diga.
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Cartas anónimas
Teen FictionChristopher y Rebeca, mejores amigos por tres años, se conocieron cuando tuvieron nueve y por problemas se separaron a los doce. Rebeca no tuvo la oportunidad de decirle que lo amaba, apenas eran niños sin conocer el amor y se dio cuenta de que lo a...