Si, lo amo. No quería admitirlo, no quería ni pensarlo. Pero llevo esto desde hace años. Desde ese día en que lo vi por primera vez, me sonrió con esa sonrisa inocente y me invitó a su casa. La mirada divertida con la que me miraba todos los días cuando pasaba por mí para salir a jugar. Creí haberlo olvidado, creí que esto que sentía se había esfumado por el tiempo, o por el cambio que tuvo, o quizá también por no haber hablado con él por años. Pero evidentemente seguía ahí, pasar tanto tiempo con él, todo lo que pasó este tiempo, todo me había hecho volver al mismo lugar del que pensé que me había alejado, pero en realidad ni siquiera me había movido. Estaba incluso más cerca que nunca.
Abrí los ojos, estaba boca abajo. Mis ojos reflejaban una cama diferente a la mía y una grande figura a mi derecha. Me levanté de repente, me sentía algo perdida. Estaba en pieza de Harry, no sé en qué momento me dormí. Miré a Harry, estaba aún durmiendo con los ojos cerrados, la respiración calmada y con algunos de sus rulos en su frente. Di un paso para atrás y me volteé, levanté la pierna y salí de la habitación.
Afortunadamente las chicas estaban durmiendo. Tomé mi celular y miré la hora. 8:47. Genial, dormí cinco horas. Bajé a la cocina y me puse a cocinar, odio hacerlo pero si no lo hago yo no lo hace nadie y amo los waffles. Hice aproximadamente veinte, quizá parezcan muchos, pero estas chicas comen mucho.
Las chicas se levantaron a las 10:30 y se ocuparon de casi liquidar la comida que que hacia un rato termine de cocinar. Luego de un rato se fueron cada una a su casa. 'Al fin tranquila'. No es que no las quiera, las amo, sólo quiero estar un rato sola.
Subí a mi habitación y me tiré a la cama a dormir otro rato. Tiré mi cuerpo sobre el colchón y me dormí más rápido que nunca.
Crucé a su habitación, pasé por su ventana y miré a su cama. Estaba ahí, acostado sobre el cuerpo de alguien más, con su boca pegada en el cuello de esa mujer. Las piernas de ella abrazando su cintura, las manos de él en la cadera desnuda de la chica. Él llevaba puesto sólo un bóxer y ella estaba completamente desnuda. Mis ojos se llenaron de lágrimas al instante, todo se tornó borroso, ahogué un grito en mis manos, pero no fue suficiente; levantó su mirada. Salí por la ventana y entré a mi habitación, quise cerrar la ventana pero él me ganó y entró. Corrí escaleras abajo con las mejillas empapadas de lágrimas. No lo quería cerca, no quería hablar con él, no quería que me dijera que lo perdone y me bese, que luego me diga que me quiere y que no es lo que parece, cuando es exactamente lo que parece. Pero no podría no besarlo, ni abrazarlo, o responder 'Yo también' a sus palabras. Entré al baño de abajo y cerré con llave.
Me desperté, tenía a Harry sobre mí zamarreándome.
