Hoy es viernes, maldito viernes. No quise ir a la escuela porque sabía que vería a Rose y sabía que no podría verla sin negarle aquella salida que tanto había esperado pero que sabía que no terminaría nada bien, llegó la hora del recreo y te me acercaste, me lanzaste una sonrisa como esperando una respuesta y sólo sentía mi cuerpo tembloroso, así que sólo agaché la mirada y te dije «mañana a las 8pm, no llegues tarde» y solo te fuiste sin sonreír ni hacer mayor gesto, creo que te molestó la frialdad con la que hablé pero es que no podía hablar de otra forma estaba confundido y un poco dolido, justo hoy vi a tu novio, me sigue mirando mal y sigo sin saber porqué.
De pronto llega un amigo en común y me pregunta si me he enterado, anonadado le dije que no y me lo contó, ya no andabas con novio, estabas soltera y mi reacción cambió de momento.
Sonreí a tal punto que sentí que el día se volvió hermoso, y no sabía que podría pasar al día siguiente pero ahora sólo sé que me siento extasiado.
Ya es de noche, ha pasado un día muy rápido y sólo quiero que llegue mañana, no puedo más con esta duda condenada.