Harry se sonrojó, mordió su labio y salió automáticamente de su caseta, estaba muy oscuro, había una que otra luz de algún foco alumbrando. No recordaba donde exactamente estaba la caseta de su novio, so decidió ir una por una. Se asomó en la de Liam y por poco aplastaba su cabeza, pues se había quedado dormido con la cabeza hacia afuera, "oops" susurró. Fue a la de Stan y sabía que lógicamente esa no era, quizá la próxima, avanzó su paso, se asomó en la caseta y entró.
— Ya estoy aquí —susurró algo nervioso. No se consideraba amante de la oscuridad.
— Hola amor —Louis extendió sus brazos hacia el rizado quien no dudó en sentarse sobre su regazo y abrazarlo. Acarició su rostro dejando un suave beso en sus labios. Harry cerró sus ojos y se dejó llevar por la dulce sensación. Louis bajó su mano, acarició su cuello y enredó sus dedos en aquellos brillantes rizos.
— ¿Oye bebé, cómo hizo Niall para llevársela?
— Ni idea, ellos salieron y no regresaron.
— ¿Se la habrá tirado?
— Nah, no creo.
Continuaron besándose, pausaron para tomar aire y dedicarse bobas sonrisas. Louis escuchó a Eleanor acercarse. Sacó bruscamente a Harry de sus muslos.
— Maldita sea —el rizado se agachó para levantarse e irse.
— Te quedas aquí —dijo el otro agarrando su pierna.
— Lou, por poco me caigo —chilló.
Harry se sentó a su lado. Ella entró de sorpresa y miró frustrada.
— ¿Otro más? ¿No podré dormir contigo hoy?
Louis era todo muecas, repitió el gesto, ésta vez negando con su cabeza.
— ¿Louis, amor, puedes salir un momento? —preguntó ella.
— ¿Para qué?
— Avanza quieres.
Él se quejó y la alcanzó, dejando la cortina abierta. Eleanor estiró sus brazos hasta el cuello de Louis, plasmándole un beso sobre sus labios. La sonrisa se borró del rostro de Harry. Ella le forzaba a abrir sus labios pero Louis no le respondia, estaba sorprendido. Intentó alejarse pero ella volvió a pegarlo a su cuerpo. Los ojos de Harry estaban hechos un mar las lágrimas. Niall se percató, en esos momentos Harry era la debilidad hecha persona.
— ¿Aún no quieres dormir conmigo? —preguntó insinuadamente.
El ojiazul mira a Harry, lo nota cabizbajo.
— ¡VÁMONOOOOS! —gritó Niall agarrando a Eleanor por las piernas subiéndola a su espalda.
— ¡¿QUÉ?! ¡¿QUÉ HACES!? SUÉLTAME IDIOTA —gritaba golpeando su espalda pero él la ignoraba por completo.
Louis entró a paso de tortuga, observó a Harry y vio que estaba sollozando, a su vez llorando "disimuladamente". Se sentó su lado.
— ¿Harry, no sabes si alguien tiene cloro para hacer un enjuage bucal?
Harry soltó una débil carcajada. Nunca se había sentido así. ¿Celos, inseguridad, miedo, furia? ¿Qué le pasaba? Lo único que pasaba por su mente es el famoso dicho "nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde". Inseguridad, miedo de perder a Louis, era un chico con el que cualquier persona desearía estar. Enojo, celos, ganas de gritarle a aquella, "zorra, ofrecida".
— Harry, verte así me pone triste, —dijo su chico sacándolo de sus pensamientos, —te amo a ti, lo sabes.
El menor no lo miró, sólo limpió sus lagrimas con su abrigo. Louis impidió que lo volviera hacer, le limpió con sus pulgares alrededor de aquellos ojos verdes. Giró su rostro para mirarle, sus labios hinchados, debía admitir que aún cuando lloraba se veía hermoso.
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Torture (Larry Stylinson)
Hayran Kurgu[EN EDICIÓN] "¿Por qué no comprenden que el amor no entiende de edades ni reglas, de razas ni sexos?" - Nach Scratch. Obra registrada 28/12/15.