Torture (Larry Stylinson)

Capítulo 5

Harry era una persona débil pero usaba una coraza de chico sociable para evitar ser lastimado, sentimentalmente no se involucraba demasiado con las personas. Poco a poco empezó a sentir cosas por Louis, pensaba muy seguido en él, en la ternura que le inspiraba verlo sonreír, en esos ojos azul mar, su cuerpo moldeado a la perfección, pero también pensaba en lo que éste había hecho y sentía un profundo rencor. A veces pensaba que lo odiaba, otras que lo quería, para ser honestos estaba hecho un desastre emocionalmente.

Lo peor, se encontraba negado a escuchar cualquier tipo de explicación por parte del mayor. Desde antes de todo el problema, él ya lo ignoraba, por lo mismo, siempre le había parecido un chico guapo y no quería caer en eso que llaman amor, más las personas con las que se relacionó desde que entró a la universidad no eran las mejores influencias, hablaban mal de todos, incluyendo a aquel chico.

Harry llegó a su casa, se encontraba en su cama, pensaba en la noche tan devastadora que llevaba, le mandó un mensaje a Lottie avisándole que ya había llegado, tal cual como le prometió. Entre todo, era un hombre de palabra. Tomó un medicamento para el dolor de cabeza, que a su vez daban sueño y en cuestión de segundos quedó rendido.

Al despertar, se sentía muy débil, decidió tomar un baño de agua fría para levantarse bien y luego prepararse un buen desayuno. Luego de hacer todas estas tareas entró a su facebook, no tenía ninguna notificación, entró al perfil de Louis, su última actualización había sido una foto de un jugador de fútbol, ésto no le llamó mucho la atención así que salió inmediatamente del perfil. Al llegar a la planta baja, notó su auto en la marquesina. Gracias al chofer que se lo buscó, ya que le había dicho donde se encontraba la noche anterior mientras era llevado a su hogar. Se fue al patio a tomar aire fresco; empezó a cantar.

"When I see your face, there's not a thing that I would change, cuz' you're amazing, just the way you are."

Su voz era hermosa, pero él no sacaba provecho de ello, cantaba cuando estaba solo, le daba vergüenza hacerlo en público. Hablar de sus gustos, era otra cosa que también se le hacía difícil. Sacándolo de su motivación, sonó el timbre de su casa. Era Niall, un joven irlandés, pelo teñido de rubio, estatura media y unos ojos profundamente azules; amigo en común entre Harry y Louis. Estudiaban en la misma universidad pero distintas materias, él estudiaba Idiomas.

— ¿Quién será a esta hora? —se preguntó, abrió la puerta.

— Surprise! —gritó con un espíritu animado el irlandés, su alegría era contagiosa. — ¿Qué me preparaste de comer? —preguntó rápidamente.

— Yo comí frutas, toma lo que desees, estás en tu casa. Por ahí queda pizza, la puedes recalentar.

Harry solía ser amable con las personas que conocía, con los demás no tanto.

— ¿Se vale el refrigerador completo? —preguntó Niall en tono burlón.

— Me deberás una pensión alimenticia de por vida entonces.

Niall hizo caso a su palabra y recalentó la pizza, luego se sentó en el sofá. — ¿Qué te pasa? Te noto extraño.

— Nada en concreto, ayer tuve un mal día.

Niall no era una mala persona, ni se burlaba de los demás, para él todo era paz, amor y sobre todo comida. Era de las pocas personas en las cuales Harry confiaba.

— Cuéntame —le dijo el irlandés, dando un bocado a la pizza.

— El viernes estaba en una fiesta, me peleé y perdí mi auto durante la noche —seguía mintiendo, no quería contarle a nadie lo sucedido. Confiaba en Niall pero no sabía como explicar semejante acontecimiento. 

— ¿Con quién peleaste? —preguntó el otro sorprendido, llevándose la otra mano a la boca y abriendo sus ojos como plato.

— No sé, no se veía bien la cara por que casi no había iluminación.

— Oh, que mal —presentía que el de rizos le mentía o al menos no le decía toda a la verdad, así que prefirió cortar el tema. Sacó su celular revisando su agenda. — ¿Quieres ir a jugar golf? Hoy habrá sección todo el día.

— No gracias, aún sigo cansado, prefiero quedarme a descansar. Iré luego, te lo prometo —dijo Harry poniendo su mano en el hombro del irlandés y sonriéndole a medias amablemente.

— Está bien, ricitos —burló. Ya había terminado el pedazo de pizza. — Me voy, me espera un buen día.

— Pásala bien —dijo haciendo el símbolo de paz con sus dedos.

Niall se fue, en ocasiones cuando veía a Harry pensaba en Louis, conocía de los gustos del mayor hacia el rizado pero no estaba seguro si era un sentimiento correspondido. De ser cierto, tomará el papel de cupido para juntar este par.

Lunes, día de clases, Louis se percató de que algo no seguía bien con Harry, estaba ojeroso y no sonreía como solía hacer. Miró a Liam y luego a Harry, la costumbre de mirar a su mejor amigo para que notara alguna situación no se le había quitado.

Liam se dio cuenta de las miradas del mayor, así que fue donde Harry y le preguntó si estaba todo bien y éste sólo asintió, el castaño lo observó fijamente. Luego fue directo donde Louis, quizá por impulso pues ellos no se habían hablado en meses.

— Mira, no sé si me quieres decir o notes algo raro, pero Harry no está bien, le pregunté y me dio a entender que si pero no le creí, vi unas marcas en sus muñecas y su rostro no es el mejor que digamos.

— ¿MARCAS? —dijo en un hilo de voz sorpresivo. — Liam, estoy preocupado.

Harry siente su teléfono vibrar, un mensaje de texto anónimo. "No te acerques a Louis si no quieres problemas, no queremos más estorbos."

Harry palideció y miró a Louis, luego cambió su mirada y siguió su camino a clases.

Durante ese día Louis estuvo muy distraído pensando en Harry, pensó que quizá no tuvo un buen fin de semana o tuvo algún problema, pero él quería ayudarlo, ser su amigo y aconsejarle en lo que fuera. Estuvo durante toda la clase de Ciencias mirando por la ventana hasta que lo vio salir de su aula.

Arrancó un papel de su libreta y escribió algo, lo guardó en el bolsillo y también salió, trató de ser discreto para ver hacia donde se dirigía el rizado. Vio que fue a tomar agua y tomó el coraje para acercarse a él, ya que estaba solo, no pensaba hablarle pero sí hacerle llegar la nota que había escrito, así que pasó por su lado y la dejó caer en el suelo, rogaba a Dios que viera el papel y lo tomara.

Harry era de las personas que por instinto natural cuando caminan miran hacia el suelo y en ese momento al hacer esa acción notó el papel, curiosamente lo agarró y lo guardó en su bolsillo. Se fue hacia el baño y abrió la notita.

"Harry necesito hablar contigo." —Louis dejó su número en la nota pero olvidó escribir su nombre.

Harry no supo que hacer, si llamar o simplemente romper la nota, pensó que fue Louis ya que varios minutos atrás pasaba por su lado y probablemente la dejó caer intencionalmente.

— Vaya que me conoce —dijo formándose una media sonrisa en sus labios.