Arcángel

Problemas .17.

Cuenta Mel

- Vaya!- exclamo Jesica cuando me vio, si bueno yo también estoy sorprendida de mi misma. Jamás me hubiera vestido así en mi vida pero una chica lastimada hace muchas cosas por venganza. 

-Lo sé- me dije riendo

-Tu hermano te dejo salir así?- me pregunto.

- Por qué no preguntas mejor si mi hermano esta en casa?- le dije riendo, Jesica siempre ha estado enamorada de mi hermano a pesar de que yo ya le he dicho de todo para que ese amor desapareciera.

- Me conoces bien chica, pero en verdad te ves increíble... un poco demasiado descubierta pero muy guapa- me dijo, después bajo de su coche y las dos caminamos hacia las luces de la kermés. 

- Gracias- le respondí

- Este look tiene que ver con Sam?- me pregunto mientras pasábamos a un grupo de tipos embobados con lo pequeño de mi short. No había pensado en eso, me recorrió un escalofrío al recordar como Jason golpeaba al probé señor pero ahora que lo pensaba Sam no había hecho nada y no sabia si eso era bueno o no.

- Tal vez- fue lo que respondí, estábamos pasando el puesto de algodones cuando de pronto un cosquilleo empezó a surgir por mi cuerpo, segundos después Nathan se encontraba a unos metros enfrente de mi con Miranda en su brazo.

-Ah... ya entiendo, es por Nathan- dijo Jesica y ese momento casi como si hubiera escuchado si nombre, Nathan se volteo a vernos.  Su mirada con la mía conectaron durante unos minutos antes de que él empezara a examinar mi atuendo, cuando Nathan me veía casi sentía que estaba desnuda.

- Tranquila chica que se ve que estas a punto de estallar de lo roja que estas- me dijo Jesica, su voz me hizo despabilar y salir huyendo de ese lugar. Cuando por fin deje de sentir aquel cosquilleo, dejamos de caminar.

-Algo me estas ocultando- me dijo Jesica.

- No hay nada que decir, lo juro- mentir no estaba tan mal en este caso, ya que no le podía decir a Jesica todo lo que me había dicho Nathan, mucho menos decirle que Nathan era un ángel porque en ese momento me metería a un siquiatra.

-Claro...- dijo sin creerme, de pronto algo capto su atención, debía ser un chico porque Jesica se empezó a arreglar y a revolver en su lugar - ¿Quién es el chico que esta con ellos?- me pregunto. Me voltee a ver lo que ella veía solo para encontrarme con la mirada de ese chico que atormentaba mis sueños. Sam y Jason se encontraban con el chico de ojos verdes, ese chico me traía mala espina. 

Sam se percato de que lo estábamos viendo y se acerco con paso lento hacia nosotras, junto con su horrible séquito de asesinos. Sam hacia que mi corazón se acelerase a mil por hora, además le caía mal a Nathan, Bing! Bing! Bing! tenemos el ganador de esta noche.

- Te ves guapísima Mel- dijo Sam recorriendo mi atuendo con la mirada.

- Gracias- le respondí

- Mi hermano es demasiado cortes como para decirte que te ves realmente sensual- dijo Jason entre risas.

- Ya sé lo que veían en ti aquellos alcohólicos- comento el chico de ojos verdes.

- De que habla?- me pregunto Jesica.

- Nada- le dije, mientras le regalaba una sonrisa falsa a mi amiga. Metete en tus asuntos maldito, imbécil! le grite en mi mente a aquel chico. Él solo me devolvió una sonrisa torcida, vaya que este tipo si daba miedo.

- Solo una broma entre nosotros- respondió el chico.

-Ya se conocían?- me pregunto pero el imbécil respondió.

-Si pero no oficialmente, solo nos topamos una vez- dijo - Me llamo Evan- 

- Jesica- le respondió mi amiga

-Creo que fue tonto de mi parte decirte que nos viéramos hoy después de clases, se me olvido totalmente que no teníamos- dijo Sam con una sonrisa.

-No te preocupes, será para la otra- le respondí con una sonrisa coqueta, ya había puesto en marcha mi plan y no me echaría para atrás. Sam se quedo impactado de que le estuviera coqueteando y no lo culpo, después de que casi le profeso mi odio eterno pero rápidamente se acostumbro.

- ¿Y por qué no ahora? Podemos dar una vuelta por aquí, jugar tal vez algo y al final de la noche, te llevare a tu casa- me ofreció, quería aceptar pero con quien se iba a quedar Jesica.

-No te preocupes por tu amiga, se puede venir con nosotros- ofreció Jason

- No te preocupes por mi Mel- me dijo emocionada Jesica, claro... ella no tenia problema de quedarse con dos asesinos porque no sabia que lo eran. 

Antes de responder un cosquilleo sacudió mi cuerpo y no tuve que pensar mucho quien era la persona que se acercaba a nosotros. Nathan junto con su amigo Daniel caminaban hacia nosotros, Nathan traía de pocos amigos y deseaba que no hiciera una escena a mitad del campus. 

- Nathan- le saludo Sam.

- ¿Podemos hablar un momento Mel?- me pidió 

- Yo creo que no- respondió por mi Jason 

- No te estoy hablando a ti- le dijo Nathan con la quijada trabada de lo molesto que estaba. 

-En realidad puedes hacer caso de lo que dijo Jason, no podemos hablar porque yo ya me iba con Sam- le dije mientras me pasaba a un lado de Sam.

- Melliza- dijo Nathan en modo de advertencia.

- Ya la oíste- dijo Sam mientras pasaba su brazo encima de mis hombros. 

Y entonces un momento de silencio se soltó entre nosotros, nadie hablaba pero se podía sentir como el ambiente se ponía tenso. Me sentía mal por Jesica porque ella no tenia que vivir este show de drama y a un así se encontraba a la mitad de esto.