Junio decidió llegar trayendo con él una montaña de conflictos dispares.
Soy de esas personas que recuerdan el pasado con cada pequeño detalle, sobre todo, los tristes y malos momentos.
Nahuel, por desgracias e injurias de Hades, seguía estando presente de vez en vez. Y eso me ponía paranoica. Una persona inteligente se hubiera dado cuenta que seguía jugando con mis sentimientos, pero estamos hablando de mi, una persona que se ciega frente al amor.
Pero las que tenemos el corazón roto, sabemos perfectamente que para hacernos más daño. Las conversaciones no se borran.
Y mientras yo tuviera esas conversaciones, seguiría idiotizada.
De a poquito las lágrimas cedían y terminé yendo a buscar algo para comer, porque, como bien muestran en las películas de amor, no hay nada mejor que el helado.
Yo: Sigo enamorada de Nahuel.
Iara: Pero... Tomás?
Yo: Quizás nunca sentí nada por él...
Nunca fue Tomás. Siempre fue Nahuel.
Y ese pensamiento cambio todo.
Tanto Tomás como yo nos habíamos comportado como idiotas enamorados mientras hablábamos, pero cuando nos veíamos éramos dos simples amigos. Es verdad que las chicas no dejaban de repetir que haríamos linda pareja, y yo tampoco no paraba de hablarles sobre de él. Y sabía que él hablaba de mi con sus amigos.
Pero no. Era todo un simple truco para olvidar.
Hazza: Shu, tenes que decirle lo que te pasa a Tomás...
Yo: Pero... Si el siente algo lo voy a lastimar
Hazza: Lo vas a lastimar más si no le decis porque le vas a dejar de hablar
Pero como nunca hago caso a lo que me dicen... No le dije nada. Ignorando todos los "te quiero", haciendo que no me importaba sin darme cuenta que era lo que más necesitaba.
Por el grupo que se había armado seguían hablando normalmente. Tomás contestaba de vez en cuando, justamente cuando yo no hablaba y viceversa.
Una semana después ya estaba lamentándome lo que había hecho, queriendo saber cómo le había ido hoy en el colegio, en básquet, en... ¡yo que sé! Sólo quería hablar con él.
- Euu, ¿hoy no es el cumpleaños de Tomás?- Amalia se estaba dirigiendo a mi. DUH YO ERA LA ÚNICA IMBÉCIL QUE CONOCÍA UN TOMÁS.
- ¿QUÉ DÍA ES HOY?
- Once...- respondió Sol- el día del cumpleaños de mi hermano.
El hermano de Solana se llamaba Tomás.
Pero, Tomás. Mi Tomás. Cumplía el once.
-Hoy es el cumpleaños de Tomás.- dije con un tono que detonaba tristeza.
La primera reacción de las chicas también fue quedarse pasmadas, pero después Ami agarro el celular, entró en el grupo, y empezó a grabar.
- ¡Tomiiiiiiiii! ¡Feliz cumple! ¡Ojala lo estés pasando bien!
- Siii, pasala re bien- agregó Rosi.
- ¡¡Feliz cumple Tomchu!!- saludó Plo.
- Shu, decile algo...- Se produjo un silencio. Ami no sabía que me había dejado de hablar.
- Shu acaba de subir, dijo que tenía que estudiar no sé qué cosa, ¡pero te manda saludos!- Rosi salvándome la vida.
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¿?&Julieta
Romance¿Por qué siempre es el chico el que se enamora y la chica la que le rompe el corazón? ¿Por qué no al revés? ¿Es que sólo las chicas pueden romper corazones e irse con otros? Soy Julieta, y estoy harta de estas típicas historia de amor, por eso voy...