No siempre después de algo malo, viene algo bueno.

12 1 0
                                    

Cuando llegué a casa trate de disimular mi mal estado. Pero mi mamá tiene demasiada nariz para olerme cuando estoy mal.

O yo no sé disimular muy bien.

50% Y 50%

- ¿Seguro que está todo bien?- me volvió a preguntar.

- Si, anda a dormir, estas cansada. Yo me cambio y bajo.

Asintió y se fue a dormir.

Eran las 6.30 y todavía no podía conciliar el sueño. A la noche de ese mismo día estábamos todos invitados a la fiesta de cumpleaños del papá de Camu. Pensé cada diminuta cosa que tenía que hacer para no pensar en Tomás.

Pero al cerrar los ojos, estaba su imagen,torturándome, haciéndome llorar.

...............

10:29

Lo poco que había dormido, lo dormí mal.

Mensaje de las chicas.

Los abrí, pero no los leí.

Me dolía la cabeza. No quería hablar con nadie.

10:30 mi celular volvió a sonar.

Tomás: No sé qué decirte, Sol me contó que estuviste mal anoche

Por mucho que lo odiase, no podía dejar de hablarle.

Yo: Sep, bastante mal...

Tomás: Bueno, creo que debería pedirte perdón. Cómo te sentís ahora?

Claro, porque con un sencillo perdón vas a poder juntar todas las piezas de mi corazón y dejarlo como si esto nunca hubiera pasado ¿no? Lamentablemente los corazones rotos no se arreglan con un simple perdón.

Yo: No tenes que pedir perdón

Y era verdad ¿por qué debía pedirme perdón? ¿Por quererme como soy? ¿Por ser bueno conmigo? ¿Por enamorarme? ¿Por ser yo la imbécil que buscaba lo imposible?

Yo: O sea, no soy nada ni nadie para que me pidas perdón...

Y lo más triste es que era verdad...

Tomás: Si sos alguien. Tal vez debí ser más disimulado...

Yo: Quizás, o tal vez decirme...

Tomás: En serio te digo, si me queres bloquear, eliminar o dejar de hablarme, lo acepto y lo entiendo.

No puedo. No puedo porque por mucho odio que te tenga, te quiero siempre un poquito más.

Yo: Ese es el problema. No quiero. Ayer me podría haber caído por las escaleras y ver como cada diente se me caía, o que un asesino me corte las extremidades y después me tiré a la pileta para que me ahogue, o simplemente tirarme del balcón y morir sin más. Pero nada de eso me hubiera dolido tanto como lo de ayer. Y no hablo de verte con Agustina, sino que no hayas venido a hablar. Eso fue lo peor.

Tomás: Te puedo decir una cosa? Nunca hagas eso por nadie. Nunca

No entendía que hablaba con una suicida.

Tomás: Agus es una amiga, tal vez algo más, pero no es mi novia, ni estamos en algo

Yo: Creía que sabiendo cómo me sentía yo al respecto tuyo me dirías, para que deje de hacerme tanta historia, porque realmente prefiero el baldazo de agua fría antes del invierno...

¿?&JulietaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora