ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ǫᴜɪɴᴄᴇ.

113 26 1
                                    

.

Así, pasan las semanas, Pandora y Darius son muy unidos. Ella, con sus mimos y cariños, hacen más feliz al niño de lo que es.

Pasan días tras días, y las Essai, van enseñando más lecciones y valores a los niños con cada pequeña oportunidad que tengan... o eso es lo que hace Pandora.

— ¡Henry basta! —chilla Fler riendo a carcajadas mientras un hombre de cabello castaño, de unos treinta y dos años de apariencia, vestido elegante, le besa el cuello. Ambos se encuentran en una de las casillas barrocas, pintadas de blanco. Ella ríe y murmura:

— Es en serio, basta, nos pueden ver idiota.

— ¿Así tratas a tu novio? —Pregunta Henry y ella ríe.

— ¡Fler!

Ambos voltean y ven a Leo, que sube las escaleras con una tórtola muerta en las manos. Fler chilla y dice:

— ¡¿Qué es eso?!

— Una tórtola que cazé, fué muy fácil. Tengo buena mano para la honda. —Contesta él acercando la tórtola a Fler y ella retrocede asqueada. Henry ríe y se arrodilla en una pierna, pone una mano en el hombro observa a la tórtola y dice sonriendo:

— Felicidades Leo, eres excelente cazando.

— Gracias Henry. —Contesta Leo sonriendo. Henry la toma del ala y dice:

— Con un poco de práctica, podrás cazar cosas más grandes.

— ¿En serio? —Dice Leo sonriendo y Fler roda los ojos sonriendo.

— Sin duda alguna, pero déjame decirte algo... ven. —Leo se acerca y Henry le dice en voz baja— ¿Sabes cúal es la fiera más difícil de cazar? —El niño niega con la cabeza como todo pequeño e inocente— Es muy fácil, son las mujeres.

Fler ríe a carcajadas y dice:

— Para ti, es difícil por que eres un idiota, pero a mi niño Leo, le será muuy fácil encontrar mujeres.

— Tienes razón. —Entrecierra los ojos pensando— Oye, Leo, dime algo, ¿qué sabes de mujeres? —Dice Henry sonriendo. Fler ríe y Leo se encoge de hombros, Henry niega con la cabeza riendo y dice:

— Las mujeres son la cosa más maravillosa del mundo cuando se trata de complacerte.

— ¿Complacer? —Pregunta Leo arqueando una ceja confundido.

— Shh, no le digas nada al niño, tiene ocho años. —Advierte ella riendo.

— Es mejor que esté preparado, así como tú dices, no le debe ser difícil conseguir mujeres, y de las buenas eh. —Dice guiñándole un ojo a Leo— Hay que enseñarte el complicado arte de la seducción Leo... para poder darte los placeres de la vida, serás un rey y tendrás todo un séquito de mujeres a tus pies, debes estar preparado para ello ¿no? —Le dice él sonriendo.

— Supongo que sí. —Contesta el niño encogiéndose de hombros.

— Un momento, si alguien le va a enseñar cómo seducir a una mujer, ésa seré yo, tú eres un inútil. —Dice Fler moviendo la mano.

— ¿Hagámoslo entre ambos no? Así tendrá a un hombre y una mujer enseñándole. —Dice Henry a Fler y ella suspira diciendo:

— Está bien, pero lo tuyo será inútil.

— Claro que no, yo tengo muchas mujeres a mis pies, tú eres una de ellas. —Leo ríe ligeramente pero Fler lo hace a carcajadas— Bien, Leo, tú tienes dinero ¿no? —Leo asiente arqueando una ceja— Excelente, ése es un factor importante, por que con ello puedes impresionar a una mujer.

Ángelus©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora