Pandora Laborda es una humilde campesina, quien a su corta edad, es asignada como tutora del pequeño príncipe de su reino. Una vez en el palacio, descubre que sus compañeras tutoras no desempeñan su trabajo como corresponde, así que decide tomar car...
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Castillo central en Marfil, capital de Tenma.
PANDORA SE ENCUENTRA CAMINANDO CON TRANQUILIDAD. La brisa primaveral, estremece a cualquier ser vivo que se halla afuera, puesto que la belleza que rodea el castillo, es impactante para la vista. La misma Pandora de siempre llega a la sala frontal, observa a su alrededor —bastante silencioso— suspira y se tira en uno de los sofás blancos con bordes dorados, bastante aburrida. Mueve en forma circular el pié y murmura:
—Qué aburrido.
—¿Aburrido? —responde una voz madura en el fondo. Ella se endereza y se encuentra con una mujer de unos treinta y cinco años aparentemente, con sábanas en las manos, de cabello castaño y lacio.
Ésta la observa sonriendo, mientas Pandora ríe y responde:
—¿Quieres que te ayude Rocket?
—No, sólo son sábanas, no te vas a divertir haciendo esto —responde ella riendo con el ceño fruncido.
—Como sea, moriré si me quedo aquí —murmura Pandora saltando del asiento y llega a ella animada.
—Bien —responde Rocket con risas y ella coge varias sábanas mientras comienzan a caminar en dirección a las escaleras, mientras comienzan a hablar y reír, cruzan las distintas salas de estar, con tapizados rojos claros, vitrales cubiertos ligeramente por cortinas pesadas bermellón y sofás naranjas con detalles granates. Llegan a un pasillo sin decoración, sólo a lo largo de ésta hay pintura celeste cielo, y cortinas blancas, Pandora se detiene en uno de los muchos ventanales que hay del lado contrario a la pared, que da al jardín de claveles del castillo. Rocket se coloca detrás de ella observando también.
Cabello despeinado y encrespado, más corto a los lados, hombros anchos y cintura estrecha, vestido con una camisa y pantalones mostazas. Labios finos y barbilla cuadrada.
Darius ya no es un niño alegre, ahora es un atractivo hombre de sonrisa blanca.
Él está con su prometida y pareja Sara Collins —ya madura y desarrollada, con curvas como cualquier chica de su edad, lleva puesto un vestido verde limón y rosa, inflado en la falda y flores en el cabello como accesorio—. Ambos se encuentra riendo con mientras que él la sostiene de la cadera subiéndola a sus brazos mientras la besa.
Rocket orbita los ojos nefasta y ordena hacia Pandora:—Continuemos.
—¿Qué pasa? —murmura ella en su dirección mientras sigue observando a los dos. Rocket la estira del brazo y la acusa:
—No tienes que fingir, porque eres pésima. Sé que te duele, y te duele mucho.
—El que sepas de mi dolor no te obliga a sanarlo —responde Pandora en voz baja.
—¿Justo tuvo que ser él?
—No fué justo él. Él fué el único —responde Pandora—. Nunca hablé con otro hombre, le dediqué toda una vida, pasó sin que me dé cuenta.
