Ángelus©

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴠᴇɪɴᴛɪᴅᴏs.

[...]

Más tarde, Pandora se encuentra en la habitación de Darius, sentada en el borde de su cama con la vista en el suelo. Suspira hondamente y una chica de unos veinte años ingresa con sábanas en manos, sus ojos grises brillan al ver a Pandora, se acerca y dice:

—Hola Pan, ¿qué sucede?

—Extraño a Darius. —Responde ella en tono triste. La chica ríe y sacude su corto y castaño cabello en desaprobación.

—Tranquila, ya volverá.

—Lo sé, sólo que ésta vez está tardando. Ya es pasado medio día, y aún no llega. —Se excusa Pandora revolviéndose incómoda en la cama. La chica acomoda las sábanas en el armario de Darius, mientras dice:

—Ay niña, en verdad lo quieres mucho, tranquila, ¿debo repetirlo? Tal vez, sólo se está divirtiendo, además, está con su prometida. —Levanta un dedo mientras sonríe ladina— Corrección, su reina. Déjalo que se divierta con la niñita.

—Tienes razón Amber. —Suaviza la mirada melancólica y luego carcajea leve— Espero que se esté divirtiendo.

Terpsícore; ciudad de Tenma.

  En otro punto del reino, se encuentra Darius en un jardín. Junto él, está su prometida; una niña con el cabello pelirrojo de rizos abundantes, pecas en el rostro y ojos de color verde musgo. Trae puesto un vestido verde limón, con un sombrero con flores en él.

  Darius la tira de la mano y dice:

—Ven, veamos tus flores.

—No son mías, son de mi mamá. —Responde la niña bastante alegre. Ambos se quedan frente a un jardín con claveles y girasoles. Él frunce los labios y pregunta:

—¿No tienes rosas?

—¿Rosas? No-oh odio las rosas. —Responde la niña con una mueca. Él frunce el ceño y dice:

—A mi Essai le encantan.

—Tu Essai está loca, las rosas tienen espinas.

—¡No le digas loca! —Protesta él en tono suave— Todos tenemos espinas.

—Claro que no, yo soy un clavel, y si tu Essai dice que es una rosa, pues que lo sea. Te va a lastimar.

—Pues no me importa, ella es hermosa como una rosa, y si estar cerca de ella me lastimará, pues entonces soportaré el dolor. —Responde él sonriendo. La niña frunce el ceño y dice:

—¿Ella no es más bonita que yo o sí?

La niña lo pincha y él se queja, luego hace un puchero y dice:

—Bien, tú eres más bonita que ella Sara.

—Juguemos algo. —Sugiere Sara con un aplauso— Ven mi amor.

Sara Collins, la prometida de Darius, hija de uno de los miembros de la corte del rey Oritel, estira a Darius de la mano mientras corre muy de prisa.

—¡Ya voy! —Se queja él riendo.

Tenma. Capital.

  En el castillo central, Pandora se encuentra caminando en los pasillos; se detiene al llegar al trayecto de la habitación del príncipe Alone, así que sonríe y susurra para sí:

—Bien, hora de darle una sorpresa al príncipe Alone.

  Corre de puntillas y llega a las dos puertas de él. Se recuesta por la pared y se desliza hacia la puerta, posa una oreja y no oye nada, entonces toca la puerta y oye la voz de Alone: