Ángelus©

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴠᴇɪɴᴛɪᴛʀᴇs. (Ⅲ)

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  Pandora se encuentra volviendo del bosque, planchando con las manos su vestido, luego de haber jugado con Leo. Alone se recuesta en la pared sin ver a la misma, así que se encorva y tiembla, luego susurra:

-Pan... dora...

Comienza a toser y ella lo escucha, frunce el ceño y se encamina hacia el lugar, llega hasta los jardines y observa que Alone está de espaldas, sonríe y dice:

-Príncipe, se encuentra bien. Sabía que lo lograría.

Se acerca a él y Alone sigue encorvado, con una mano en la pared. Pandora le toca el hombro y dice sonriendo:

-¿Príncipe?

Él se queda tieso y murmura:

-Hola Pandora... te busqué... por todas partes...

-Lo lamento, estaba ocupada, ¿qué necesita? Sabía que usted es fuerte, ninguna cadena lo derrotará. -responde ella sonriendo orgullosa. Alone se queda en silencio aún de espaldas responde:

-Te necesito... Demasiado...

-¿Alone qué sucede? -pregunta Pandora con el ceño fruncido. Alone vuelve a toser, ella lo rodea y se queda parada frente a él, helada.

Alone tiene las manos en la boca, pero las retira y éstas están empapadas de sangre, él la observa directamente a los ojos y dice:

-No soy fuerte... Si no estás conmigo...

Cae de rodillas y Pandora grita, con ambas manos sostiene la cabeza de Alone mientras él observa el cielo débilmente, la vista se vuelve borrosa, y definida, borrosa, y definida, mareándolo más, sólo puede verla a ella llorando desesperada, mientras le habla, sólo que él no puede oír nada, así que levanta la mano débilemente y acaricia el cachete de Pandora, mientras murmura:

-Gracias... eres lo único... bueno... en este infierno...

Aprieta la cruz de su collar y ella observa que aún tiene puesto su rosario, así que aprieta los ojos y se le parte el corazón, creyendo que no pudo protegerlo, lo aprieta más contra sí mientras Alone comienza a cerrar los ojos lentamente. Pandora aprieta sus manos empapadas de sangre y dice:

-¡Alone, no, quédate conmigo por favor! -aprieta los ojos con los dedos entrelazados con los de él, y los rosarios entre sus dedos- No... me dejes... te lo
suplico... eres demasiado bueno. -aprieta la cabeza de Alone contra su pecho, sus lágrimas caen por las mejillas de él- ¡No lo mereces, eres bondadoso, y puro, por favor no dejes que esa víbora logre ser libre!

Alone deja de moverse y ahora sólo Pandora lo sacude, sintiendo que tiene un muñeco entre manos. Eso sólo la desespera más, la culpa sólo sube en su pecho, impidiéndole respirar, ella estaba riendo y jugando con Leo, mientras que Alone, respirando sus últimos alientos, la buscaba sólo a ella, levanta la vista al cielo, aprieta dientes y grita:

-¡Alone vuelve a mí por favor, si lo haces, juro darte mi vida, te serviré hasta la muerte, seré tuya, todo lo que quieras, pero no te vayas!

Los rosarios queman a Pandora, y ella gime, suelta a Alone y observa sus dedos, un par de cuentas del rosario se marcan en sus dedos como quemaduras, así que ella apoya el dorso de su mano en sus labios con una mueca de dolor al ver a Alone en el piso, sin vida.

El rosario se queda colgando del cuello de Alone, ella lo observa con lágrimas, al notar que no se mueve, se para y lo vuelve a abrazar, luego le besa profundamente las manos, y dice:

-Despierta... por favor... -le besa la frente gimoteando- Alone, te necesito... te quiero demasiado...

Tararea gimoteando la canción de cuna que él le había interpretado con el arpa en el día anterior, lo aprieta contra su pecho y siente que él se calienta, frunce el ceño y oye un susurro: