30. Brogan

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Desperté y mire hacia mi izquierda, Morgan dormía en tan solo bóxers.

¿Por qué regresa a dormir conmigo?

¿Por qué las deja a media noche?

¿Es que acaso se siente más tranquilo a mi lado?

Preguntas que rebotan en mi mente, ansiosas por una respuesta.
Me puse de pie y me estiré, entre al baño y lave mis dientes. Me di una ducha y me puse un conjunto de ropa interior negro. Seque mi cabello con una toalla, quedando algo húmedo. Tome mi iPhone de la mesita de noche y cheque mi Instagram mientras salía por la puerta, tropecé con alguien. Una chica morena de cabello castaño y grandes ojos verdes con unos labios carnosos y a decir porque esta semidesnuda frente a mi, tiene un excelente cuerpo.

—¿Dormiste con el?

—Soy su hermana.

—¿Manely? Es un placer soy Brogan—Yo asentí y le seguí el juego.—¿Dónde está? Me ha dejado sola.

Lo siento, me da igual.

Mejor cambie de tema y le ofrecí comida;

—Así es, ¿desayunamos?

—Oh...bien.—Exhalo vencida.

Morgan

Estire mi brazo para acercar a Kylie hacia mi, pero no estaba. Abrí mis ojos y bostece, me puse de pie y me estiré. Tome mi iPhone y lo metí dentro del elástico de mis bóxers.

Brogan.

Salí de la habitación y me encontré a las dos chicas en ropa interior cocinando. Les tome una foto y volví a poner el iPhone en su lugar.
Brogan volteo y corrió hacia mi, besando mis labios.

—Me dejaste.—Hizo un tierno puchero.

—Tenía que cargar mi iPhone, fui con ella y me quede dormido.—Hable con tranquilidad.

—Tu hermana me cae bien.—Sonrió y se giró, mientras yo le daba una nalgada. A lo cual Kylie hizo una mueca y siguió con lo suyo. Me acerqué y la tome del brazo.

—¿Podemos hablar?—Se zafo de mi agarre y volvió a lo suyo.

—Se quemara mi Hot cake.

—Ahora.—La tome del brazo jalándola hacia nuestra habitación.

—¿Qué quieres?

—¿Por qué te hiciste su amiga?

—¿Por qué las traes aquí? ¡Puedes llevarlas a un motel!

—Asco.—Negué con la cabeza.

—¡Entonces llévalas a un hotel de 5 estrellas!—Grito en bajo, molesta mientras ponía sus manos al rededor, de su desnuda cintura.

—Solo a ti te llevaría a un hotel de 5 estrellas.—Le sonreí. Sus facciones se tranquilizaron y se sonrojó un poco.

—Bien, vamos a desayunar.—Se giró pero la tome de la mano, atrayéndola a mi.

—No me habías dejado verte en ropa interior tanto tiempo. Aunque desnuda te ves mejor.—Se puso roja como un tomate, mientras maldecía en silencio, como si hubiese olvidado que estaba en ropa interior. Salí de la habitación permitiéndole vestirse con algo más apropiado y me senté en la barra. Brogan ya estaba vestida con su pequeño vestido negro, se sentó junto a mí para ponerse sus tacones.

—Me tengo que ir, llámame.—Me lanzo un beso y salió de mi departamento.

—No, gracias.—Bebí jugo del cartón.

One Year Donde viven las historias. Descúbrelo ahora