One Year

50. Volví, amor.

Kylie

En el cumpleaños de Morgan, me di cuenta que realmente le gustaba intentar cosas nuevas en el sexo, como por ejemplo juguetes y posiciones. Debo admitir que me agrada eso, es decir, siempre he querido probar esas cosas porqué vida es una y vivimos para disfrutar de sus placeres.

El se había ido por tres días para una sesión fotográfica en Italia y deseaba tanto acompañarlo pero tenía que arreglar mis asuntos y conseguir un mánager o asistente, que me ayudará a organizar lo que venía con colaboración a Victoria's secret. Nugget tampoco estaba porqué su entrenador dijo que tenía que quedarse una semana en la escuela para clases especiales y eso me hizo enojar porque tenía miedo que llegarán a lastimarlo para que aprendiera. Hoy me dediqué a limpiar cualquier rastro de polvo por el departamento, Marissa se encontraba en su semana de descanso. Así es, todos me tenían muy abandonada.

Morgan llegaría hoy aunque me avisó por un mensaje que Nixon lo iba a recoger y lo llevaría a comer porqué ya necesitaban un día de chicos para ponerse al corriente, oírlo decir eso fue tan gracioso.
Mientras limpiaba mi recámara, con Heavy cross sonando a todo volumen la bocina cambió a él ringtone de mi madre que me llamaba por FaceTime, me desconecte de la bocina y le contesté, dejándome caer en la alfombra.

-Tú hermano me enseñó a usar más mi teléfono está semana y es como otro mundo. ¿Cómo estás, mi sol?-Su teléfono parecía estar recargado en los condimentos porque la observaba cocinar.

-Estoy sola, no hay nadie conmigo mamá y estoy limpiando todo esto, en realidad es un fastidio pero es lo único que puedo hacer. Resumiendo todo, estoy muy bien y tú? ¿Qué dice papá?

-Esta intentando cortar en césped pero creo que no logra encender la podadora.-Sonrió con diversión y tomó el teléfono, girando la cámara para que pudiera ver a papá de cuclillas junto a la podadra, viéndola como si tratará de desifrarla. No pude evitar reír.

-Tiene que presionar el botón de encendido una ves, tirar de la cuerda y presionar el botón dos veces. Tiene maña o tal vez me extraña.-Ella dejó salir una carcajada y le dio las indicaciones a su esposo. En seguía escuché el motor y entorne mis ojos con diversión.

-Oye ya que hoy también descanso, podemos salir a comer los tres o sólo chicas. Es decir, tienes que invitarnos a comer.

-Es una gran idea, podemos ir a desayunar porque estoy tan aburrida. Veré dónde, tienen que estar listos dentro de una hora.

-Quisiera que fuera James pero ha salido de viaje con una chica. Es extraño pero bueno, nos vemos hija. Te amamos.

Y colgó. ¿Viajando con una chica que mis padres no conocen? Eso me ha puesto a pensar, ahora que lo recuerdo estuvo dándose unas miraditas con Manely. ¡On no! ¿Estarán saliendo? Si es así, a Morgan se le saldrá un premio del coraje.

Busqué su contacto y la llamé.

-¡Cuñada! ¿te gustaron los tacones que te he enviado? Seguro se ven encantadores con tus largas piernas. Descuida sigo comprandote cosas.

-Tranquila, déjame hablar. ¿Cómo estas? Seguro de viaje otra vez.-Bromee inocente.

-Vine a Canadá, igual me sorprende a mi pero nunca he venido. De hecho, alguien más me ha animado.

-Dios, con ese vestido tus curvas son para morder.

OH MY MY MY.
Es James.

-¿Qué carajos, mi hermano?-Pregunté sorprendida.

-No, ¿qué?-Rió, nerviosa.

-¡No puedo creerlo! Tus hermanos te joderan, demasiado.

-Ellos no controlan mi vida y esperaba que lo aceptaras, chao Kyky.-Colgó, decepcionada de mi. Estoy segura que ellos no aceptarían que mi hermano, mujeriego y de mi sangre, se enrollara con su querida hermana menor. Aunque bueno, James es caballeroso y dulce, cuando quiere el idiota.